Con obras de teatro, cuentos, concursos literarios y música, miles de estudiantes costarricenses festejaron ayer el Día del Libro y recibieron el mensaje de que la lectura es un verdadero placer.
Uno de los muchos lugares donde se llevaron a cabo actividades relacionadas con esta fecha, fue la escuela Esmeralda Oreamuno en Cinco Esquinas de Tibás. Allí, los maestros se disfrazaron y hablaron de cómo los libros refuerzan la imaginación.
“Nosotros tenemos una pequeña biblioteca que vamos nutriendo poquito a poco. Todos los días se busca que los estudiantes pasen al menos 20 minutos leyendo. La idea es que ellos escojan el libro que más les llame la atención para que se sientan felices. Hoy quisimos hacer algo especial por ser el Día del Libro”, comentó Magda Ballestero, asistente de la Dirección de la escuela.
Para muchos de los menores de esa institución, la lectura sí es algo que les resulta interesante.
“Leer es muy divertido. Uno se distrae mucho; yo me siento como si estuviera en el kínder otra vez”, dijo Betsy Trejos, estudiante de sexto grado.
“De los libros se sacan muchas cosas importantes y se aprende bastante. Ayuda a desarrollar la mente”, agregó María Alba Ramírez, alumna de quinto grado. Festival literario en Cartago. Por su parte, los estudiantes de la Ciudad de los Niños, en Aguacaliente de Cartago, festejaron este día con un concurso literario.
Antes de comenzar a producir sus obras, los jóvenes recibieron la visita de los integrantes del colectivo Cuentiando, quienes les sugirieron ideas y situaciones para que pudieran escribir.
La finalidad de esta actividad no solo fue incentivar la lectura, sino también procurar que los jóvenes elaboraran poemas, cuentos, ensayos y dramatizaciones.
“Los muchachos escribieron poemas muy significativos, de gran sentido social. Leí escritos muy profundos que revelan grandes sentimientos”, afirmó Mata.
El certamen premió a 20 jóvenes en cuatro categorías.
Todas las actividades de ayer forman parte de un programa conjunto entre los Ministerios de Educación y Cultura que busca que la lectura sea parte de la cotidianidad de los estudiantes.