Comer chiles picantes puede reducir la presión arterial

La sustancia que provoca la sensación de picante relaja los vasos sanguíneos

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Pese a que se consideran dañinos para el sistema digestivo de algunas personas, el chile picante puede ser beneficioso para personas con problemas de hipertensión.

Investigadores de la Universidad Médica de Chongking, en China, descubrieron que la capsaicina, la sustancia responsable del sabor picante, tiene propiedades que hacen que los vasos sanguíneos se relajen y la sangre fluya más libremente, lo que baja los niveles de presión arterial a largo plazo.

Los resultados de esta investigación se publicaron en la última edición de la revista científica Cell Metabolism.

Según los investigadores, la capsaicina consigue activar el gen receptor de potencial transitorio V1 (TRPV1) aumentando la producción de óxido nítrico, una molécula gaseosa que protege los vasos sanguíneos contra la inflamación y la disfunción. Así se bajan la presión arterial y la posibilidad de padecer hipertensión.

La investigación señaló que esta sustancia está presente en todos los chiles picantes, pero es más común en chiles del oriente del mundo, como la pimienta cayena o el llamado “pimiento fantasma”. El chile jalapeño, más común en el continente americano, no tiene tanta concentración de capsaicina.

Tras las pistas. Las investigaciones comenzaron con ratas a las que se les indujo la hipertensión, y, al comprobar los resultados, se iniciaron las pruebas con humanos.

En el primer estudio con ratas hipertensas, los investigadores les administraron capsaicina de manera continua durante siete meses. Al cabo de ese tiempo, las funciones vasculares de las ratas habían mejorado y su presión arterial se había reducido.

“En nuestra primera investigación encontramos que el consumo a largo plazo de la capsaicina, uno de los componentes más abundantes en los pimientos de chile, podría reducir la presión arterial en ratas genéticamente hipertensas, por lo que decidimos investigar también en humanos”, señaló, en conferencia de prensa, Zhu Zhiming, coordinador de la investigación.

Los resultados del primer estudio con humanos demostraron que las zonas de China en las que por tradición se come más picante tienen menores cantidades de hipertensos. La prevalencia de la hipertensión es más del 20% en el nordeste de China en comparación con 10-14% en el suroeste de China.

“A la gente de estas regiones le gusta comer alimentos calientes y picantes con mucho chile, lo que confirma nuestros hallazgos”, explicó Zhiming.

Falta una comprobación. Pese al hallazgo de estos estudios, todavía falta un estudio epidemiológico a gran escala, que determine con certeza esta propiedad del chile picante y que además defina la cantidad que debe consumirse (y la frecuencia con que debe hacerse) para ver un beneficio en la salud.

Para la nutricionista costarricense Ana María Alvarado, los estudios realizados no son definitivos, y este tipo de chile debe consumirse con mucha moderación.

“Otros estudios han sugerido que el chile picante trae beneficios a las personas sanas y que no padecen de problemas gástricos. Este solo es un estudio más, pero es necesario investigar para saber qué tipo de personas realmente se benefician y con cuánta cantidad de chile”, aseguró Alvarado.

Los investigadores chinos ya trabajan en el diseño del próximo estudio epidemiológico que relacionará el chile picante con la reducción de la hipertensión.

“Debe hacerse un estudio en personas con hipertensión y con presión arterial normal y someterlas al consumo de diferentes tipos de chile, y tener como control a personas que no lo consuman. Un estudio de estos toma años, pero nos dará la confirmación de lo que concluimos en nuestro primer estudio con humanos”, dijo Zhiming.