Células madre consiguen regenerar corazón tras infarto

Pacientes recibieron entre 12 y 25 millones de células cardíacas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Una terapia experimental con células madre podría regenerar el corazón de personas que sufrieron un infarto.

Los resultados de primera fase de un estudio realizado por el Hospital Johns Hopkins en Baltimore, Estados Unidos, mostraron que estas células logran regenerar hasta un 50% del tejido cardíaco dañado.

El reporte , publicado en la revista The Lancet , también evidenció que las cicatrices producidas tras un ataque al corazón pueden reducirse luego de que el paciente reciba las células.

“Este descubrimiento reta al conocimiento convencional que dicta que una vez que el tejido cardíaco está dañado, las cicatrices son irreversibles y el músculo no puede regenerarse”, dicen los autores en el estudio.

Tratamiento pionero. Esta primera fase de la investigación tomó más de dos años.

Entre mayo del 2009 y diciembre del 2010, los investigadores reclutaron a 25 pacientes que habían sufrido un infarto. Ocho tomaron la terapia estándar con medicamentos y 17 recibieron células madre.

A estos 17 pacientes se les extrajo –a través de un catéter– una porción del tejido cardíaco. Los investigadores describieron esta porción como una parte pequeña, “similar al tamaño de media pasa”.

Una vez que la muestra fue extraída, se aislaron las células en laboratorio y se pusieron a “crecer” las células madre (estas células tienen la facultad de expandirse y reproducirse en laboratorio).

Posteriormente, los pacientes recibieron –a través de un catéter– entre 12 y 25 millones de células madre en sus arterias coronarias.

Al cabo de seis meses, los pacientes redujeron el tamaño de su cicatriz entre un 12% y un 24%, y el 50% del tejido cardíaco se regeneró.

Las ocho personas que recibieron la terapia convencional no vieron reducciones significativas en el tamaño de la cicatriz ni regeneración del músculo del corazón.

En un comunicado de prensa, el cardiólogo Chung-Wah Siu, quien no participó del estudio, señaló que “estos hallazgos sugieren que este logro terapéutico es realizable y tienen el potencial de proveer un tratamiento estratégico para la regeneración cardíaca luego de un infarto al miocardio”.

¿Qué sigue? Los autores señalan que los resultados de esta primera fase de estudios les dan el sustento necesario para continuar con la segunda fase.

“La regeneración del músculo del corazón que vimos, hace que sea necesario probar este estudio en más personas y ver si puede usarse en un futuro como terapia médica”, comentó Eduardo Marbán, coordinador de la investigación en un comunicado.