¿Recuerda esa famosa fotografía en la que Barack Obama, abrazado a su esposa, celebraba cuatro años más en la Presidencia de Estados Unidos?
La imagen se hizo viral en plataformas sociales como Facebook o Twitter. El responsable de que eso sucediera fue Sam Graham, estratega de medios digitales, quien fue uno de los que estuvo detrás de la exitosa campaña del mandatario.
Graham visitó, este jueves, el país, en el marco del 20 aniversario de la agencia Interamericana de Comunicación.
El analista resaltó que si bien el mundo de las redes sociales tiene mucho que ver con tecnología, las personas son, sin duda, un componente importante en la ecuación.
La decisión de compartir esa imagen tan humana del gobernante fue deliberada.
“Esa imagen del hombre agotado, que había dormido poco, abrazando a su esposa tras el gane, fue la más compartida en la historia de Twitter. ¿Por qué ? Porque la gente aprecia la calidad humana”, explicó el experto.
Aunque algunos intentan cuidar cada palabra que dicen en sus redes sociales y elaboran sus mensajes de manera estratégica, “las personas no responden a eso”.
Según Graham, la clave de usar estas herramientas sociales es justamente eso: “Lo social, crear conexiones, tener conversaciones genuinas”.
“Una de las cosas más interesantes en la campaña de Obama es que yo podía escribir lo que quería en los blogs, no tenía a nadie editándome. Ellos confiaban en mí, si hubieran pasado editando lo que yo escribía, quizá no hubiera sido igual”, aseguró.
El especialista destacó que en las redes sociales no solo importan las personas, sino las acciones que estas emprenden.
“La gente tiene influencia en las redes, por eso hay que aprovechar ese recurso. Cada una de las personas tiene el poder de difundir mensajes”, comentó Graham.
Mientras que en el pasado,quienes querían participar en una campaña política, podían tener un letrero en sus casas para apoyar a un candidato en particular, hoy pueden llegar a otros por medio de las redes sociales.
Durante una conferencia de prensa, celebrada el jueves en el hotel Real Intercontinental, Graham afirmó que por eso no es tan importante tener un gran número de seguidores, sino generar mensajes que muevan a la gente a emprender acciones, por ejemplo, a recaudar dinero, como sucedió en la campaña de Barack Obama.
“Usar redes puede tener sus riesgos, como perder el control de la situación, pero el beneficio es mucho más poderoso”.