Ideas para bajar fobia a matemáticas, reducir estrés y manejar tecnología inundaron el TEDx Pura Vida ED 2018

Este viernes, el Anfiteatro Coca-Cola de Parque Viva fue el escenario de discusiones sobre cómo mejorar las experiencias de aprendizaje.

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Charlas, música e interacciones entre el público se apoderaron la tarde de este viernes del Anfiteatro Coca Cola en Parque Viva, en La Guácima de Alajuela, durante el TEDx Pura Vida 2018, destinado a exponer ideas y poner a los presentes a pensar en cómo mejorar las experiencias de aprendizaje.

Desde un inicio, los expositores fueron claros. El primer charlista, el matemático, filósofo y educador Ángel Ruiz dio inicio a su ponencia con una fotografía del personaje de acción Terminator. Le preguntó a la audiencia: "¿quién es? No, no es Terminator, es el profesor de Matemáticas".

Así, este educador habló sobre la fobia alrededor de esta materia y cómo irla sacando poco a poco de nuestra sociedad.

Aprovechó para mencionar los trabajos que ha realizado durante su carrera al desarrollar materiales para educadores y dar charlas con el fin de que ellos puedan espantar los miedos que despiertan las matemáticas entre los alumnos.

Acto seguido, la economista Valeria Lentini, quien ha estudiado a fondo las características de la educación superior en Costa Rica, habló sobre las desigualdades con las que se encuentran los costarricenses una vez que terminan la secundaria.

Ella se refirió a las brechas entre géneros, entre zonas rurales y urbanas, entre quienes tienen mayor y menor capacidad económica y hasta en el tipo de educación que han recibido antes.

De acuerdo con ella, existen diferencias que llevan a las personas a alejarse de carreras relacionadas con los números, ya que las consideran difíciles.

"Se trata de saber que tenemos estas diferencias y eso no es malo, pero podemos unirlas para ir cerrando brechas", indicó Lentini.

El siguiente expositor, Guido Malenchini, invitó a reflexionar sobre la generación de los llamados millennials. Este administrador habló de cómo esta población ya no está compuesta solo por jóvenes, sino que ahora muchos se han convertido en adultos, papás y mamás, que buscan "recompensar a sus hijos" en todo momento y que esperan que los educadores hagan lo mismo.

"Hay educadores que reciben padres que les dicen: '¿dónde está la motivación para el resultado de mi hijo?', pero entonces, ¿qué pasa? ¿los premios no son para cuando se realiza algo extraordinario?", apuntó el especialista, para quien es vital analizar cómo enlazar esas diferencias para llegar a acuerdos.

Al finalizar esta presentación, el TEDx cambió por completo y dio paso al arte y a la música de la mano de un niño de seis años.

Carlos Julián Solano, vecino de Tilarán, demostró cómo su abuelo, don Julián, hizo que se enamorara de la marimba y esto lo ha llevado a ser uno de los intérpretes más destacados de este instrumento pese a su corta edad.

El menor comenzó a estudiar marimba a los dos años y este esfuerzo ha rendido frutos: presentaciones en televisión, en actos culturales y un primer lugar en el bloque infantil en el VIII Festival Nacional de Marimbas.

La audiencia disfrutó de piezas típicas como "Pasión" o "El punto Guanacasteco" durante más de 15 minutos.

Al finalizar, la presentadora Eleonora Badilla Saxe le preguntó a Solano sobre qué le aconsejaba su abuelo de cómo tocar la marimba y el pequeño respondió: "El me dice que vea cada tecla y me concentre también en la que está a la par".

De la música se pasó nuevamente a hablar sobre las diferencias que existen en la educación de las personas y lo necesario que es sacar el mayor potencial de cada quien, según sus propias habilidades.

Este fue el tema de Mario Casasola, informático, padre de tres hijos y casado con una educadora. El narró cómo tiene tres hijos criados todos de la misma forma y todos ellos con personalidades y talentos muy distintos.

Propuso tomar en cuenta esas diferencias no solo en las aulas, sino también para que cada familia sepa cómo sacar adelante a sus hijos.

Música para alegrar la tarde

A las 4 p. m. se envió a un primer descanso y a que las personas tomaran café en el Centro Kölbi, a pocos metros del anfiteatro. Se le dijo al público que aprovecharan ir ahí no solo por el refrigerio, sino también porque les esperaba una sorpresa.

Y sí, esta vino de la mano de la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Costa Rica (UCR), cuyos integrantes, mezclándose entre la multitud, comenzaron a sonar las notas de "Bolero", del compositor francés Maurice Ravel.

Conforme las notas avanzaban, más músicos se iban sumando y los presentes tomaban más fotografías y videos.

Los músicos caminaron por el centro hasta que se unieron en un punto para que todos disfrutaran de su ejecución.

"Esto está lindísimo, yo no me lo esperaba. Lo más bonito es ver cómo uno está aquí parado y de un pronto a otro se pone un músico a la par de uno para tocar", comentó Xinia Miranda, una de las participantes del evento y que llegó al centro Kölbi movida por esa sorpresa de la que le hablaron.

La música no se detuvo al concluir el descanso. La Orquesta por la Vida, que se estableció en un esfuerzo conjunto del Sistema Nacional de Educación Musical (SINEM) y el Hospital Nacional de Niños (HNN), tocó tres piezas. Esta es la primera orquesta en Centroamérica compuesta por pacientes y expacientes del HNN, todos ellos con padecimientos crónicos.

En ella participan 30 músicos que tienen como propósito desmitificar las enfermedades crónicas y la discapacidad.

"Las personas con discapacidad sí podemos hacer grandes cosas. Y esto que hicimos hoy es una prueba de ello", dijo desde su silla de ruedas Sofía Araya, quien es parte del grupo.

Araya también les dio un mensaje a los educadores: "déjenos ser parte de la experiencia de poder estudiar. Con las adecuaciones necesarias, sí, porque tal vez nos cuesten más las matemáticas, pero busquen cómo hacernos participar más".

Propuestas para el aula

Después de la música, las propuestas de qué hacer para mejorar las experiencias educativas en el aula tomaron el escenario.

El primero en hablar fue Enrique Margery, quien se define a sí mismo como "educador extremo". El relató cómo un salón puede convertirse en un sistema sumamente complejo que se asemeje a las leyes de termodinámica.

Luego dio una explicación más sencilla: con aplicar técnicas como inyectar en los alumnos el que todos están para aprender juntos y deben ayudarle a todos sus compañeros en el camino (especialmente a quienes más les cuesta). Esa motivación va a motivar al estudiantado a tener mejores resultados.

"Y también es un asunto egoísta, de saber que, como educadores, aprendemos más de los estudiantes y vamos a utilizar eso en beneficio del aula", manifestó.

El escenario fue después para Silvia Chacón. Su charla habló de cómo "educar para habitar el planeta" y de cómo, a través de estrategias para observar nuestro mundo, se puede mejorar la experiencia educativa para quienes estudian educación, pero también para quienes apenas comienzan este camino, es decir, para los niños que apenas están en la educación preescolar.

Al finalizar esta exposición llegó otra que propuso un tema con el que casi todos se sintieron identificados en el Anfiteatro Coca-Cola: el estrés.

Esta fue la temática que expuso el educador e informático Andrey Mora, quien habló de todo el mal que causa el estrés al cuerpo y cómo todos los educadores están expuestos a este mal. Pero, además, cómo los estudiantes, sin importar edad, también son víctimas del estrés.

Mora es educador en colegios técnicos y contó cómo comenzó a realizar meditación para bajar el estrés y eso le ayudó a dormir mejor y a sentirse más motivado. Luego de eso, decidió llevarlo a las aulas y dedicar unos pocos minutos a la meditación con sus estudiantes.

El relató cómo los jóvenes le han indicado que esta meditación los ha ayudado a salir adelante y a sentirse más relajados.

"Ellos dicen que esa paz es contagiosa", resumió.

Víctor González fue el siguiente expositor y contó cómo poner a las personas en el centro de las ideas, preguntarles, ver sus necesidades y ver formas diferentes de hacer las cosas, puede ser clave para diseñar nuevos productos.

Todo eso, también puede ser llevado al aula, en un ambiente en que profesores y estudiantes busquen soluciones diferentes a problemas cotidianos y a las dudas que tienen en clase.

Las tecnologías en el aula fueron el siguiente punto en la agenda. Y estas vinieron de la mano de Alberto Cañas, el primer doctor en informática que tuvo Costa Rica.

Para Cañas hay algo clave: lo primero que se necesita es un docente conocedor de la tecnología y de la programación, porque si el docente no conoce, el estudiante no va a poder aprender.

Ya hay programas que les explican programación a los estudiantes, pero hay que dar un siguiente salto a tecnologías más nuevas, que cada vez más llegan al país.

El cierre

Pocos minutos después de las 7:10 p.m. arrancó la parte final, cuando se habló de los retos país y cómo enfrentarlos.

El exministro de Educación y economista Leonardo Garnier arrancó esta última fase, donde comentó cómo los talentos también pueden ser materia de exportación.

Garnier citó, por ejemplo, de cómo la música ha sido uno de los procesos que más complejidad ha tenido, donde formar la Orquesta Sinfónica Nacional fue algo que en la década de 1970 tuvo muchos obstáculos, pero hoy, el país ya tiene calidad como para ganar premios Grammy con el talento de sus músicos.

Sin embargo, también destacó el problema de la demanda artística: "¿para qué dijimos '¿para qué tractores sin violines?' si no tenemos oídos que disfruten esos violines?" manifestó Garnier.

"La educación de nuestros muchachos y muchachas tiene que estar llena de arte. Cuanto mayor sea el gusto por el arte, más libros van a encontrar lectores que los compren, los teatros y museos estarían más llenos y habría más industria cultural", añadió.

Posteriormente, Alejandra Sánchez, una de las principales impulsoras de la robótica en Costa Rica, habló del reto de una educación memorística y cuya respuesta tiene solo una versión verdadera absoluta.

"Es más fácil aprender cuando es algo que construimos y del que nos acordamos de lugar, del momento y de la experiencia que eso nos generó", les dijo luego de que los puso a elaborar un pato con unos materiales que les dieron en una bolsa.

Y añadió: "ustedes se van a llevar ese pato y cada vez que lo vean se van a acordar de este momento, de este lugar, hasta seguramente de cómo le quedó el pato a la persona que tenían a la par".

Su propuesta es utilizar la robótica para enseñar programación, matemáticas, ciencia, biología, idiomas, entre otros.

La tecnología también fue clave para la siguiente exposición. Pablo Lizano habló de cómo pueden los educadores competir con las tecnologías y con la información que siempre se tiene a la mano con una búsqueda rápida de Google.

Aún más: ¿qué pasa cuando hay alumnos con estilos de aprendizaje muy diferentes y qué hacen uso de la información de manera muy distinta? ¿Cómo confluir las diferentes personalidades?

Lizano utilizó un rompecabezas para ejemplificar cómo lograrlo: en un rompecabezas cada pieza es diferente porque cumple una función diferente, pero todas son vitales para el rompecabezas completo.

La última charla estuvo a cargo del colombiano Juan Manuel Lopera, quien habló de cómo, mientras él crecía en Medellín en 1990, en medio de una de las ciudades más inseguras del mundo, fue el ejemplo de un maestro quien a él lo hizo seguir estudiando y no meterse en pandillas para vengar la muerte de sus familiares.

"La tecnología jamás va a poder sustituir esa labor inspiracional de los maestros. Un robot podrá enseñar a sumar o restar, pero jamás a ayudar a los jóvenes a salir adelante cuando no tienen esperanzas", afirmó el joven.

Lopera habló entonces de un dispositivo que creó, en conjunto con unos compañeros, que funciona como pizarra digital, router para Internet y ayuda a configurar aplicaciones para celulares que puedan servir para planear clases y calificar los exámenes.

El evento finalizó con más música. Kin Rivera Jr. comenzó con una charla didáctica sobre su instrumento: la batería, pero luego llevó sus sonidos de su percusión para todos los presentes y los hizo fundirse en medio de su ritmo musical.

TEDx Pura Vida ED 2018 fue el segundo de los tres eventos TEDx Pura Vida. Este sábado será el tercer y último. El TEDx Pura Vida Joven 2018 se llevará a cabo también en el Auditorio Coca-Cola de Parque Viva en Alajuela. Comenzará a las 2 p. m. y finalizará a las 8:30 p. m.

Con diferentes charlas y propuestas de cómo solucionar los problemas de nuestro entorno, una decena de expositores jóvenes buscarán contagiar a las personas de la audiencia para que elaboren sus propuestas.