San José
Qué tienen en común un alpinista, una ex primera dama, un psiquiatra teórico y un grupo musical a capella?: la pasión suficiente para alcanzar los sueños. Así lo comprobaron este jueves los 1.500 asistentes del TEDx PuraVida 2016.
La actividad, que por primera vez se realiza en el anfiteatro Coca Cola de Parque Viva, en La Guácima de Alajuela, invitó a los asistentes, durante el primer bloque, a ser tan humildes como para no creernos la especie más privilegiada del planeta, a expresar claramente nuestras emociones y enfrentar los miedos para escalar nuestras propias montañas.
Entre las primeras charlas destacó la participación del biólogo Alex Kacelnik, quien retó a la audiencia a preguntarse cómo es que los animales saben lo que deben hacer si en principio son especies sin razonamiento.
Este experto en ecología del comportamiento ofreció varios ejemplos de cómo los animales son capaces de resolver problemas cotidianos con estrategias sencillas, usando la intuición natural. Otros incluso aprenden a través de la observación y llegan a soluciones mucho más innovadoras.
Según él, esto nos lleva a pensar que el ser humano no es tan superior a los animales como creemos y que ellos, no son especies inferiores como se supone.
Por su parte, la investigadora Alejandra Quirós trajo a colación la complicada relación entre seres humanos y computadoras. Su quimera es lograr que algún día ellas nos entiendan y que la tecnología sea un medio para ayudar a las personas a leer o expresar emociones de una manera más sencilla.
El alpinista Warner Rojas también cautivó a los asistentes al TEDxPuraVida, cuando narró su aventura al subir a la cima del monte Everest en condiciones extremas como frío, falta de oxígeno, terrenos irregulares y amenazas climáticas.
El deportista costarricense reveló lo duro que fue el encontrarse personas que murieron en su intento por llegar a la cima. "En la vida hay que aprender a tomar decisiones. Yo estaba ahí porque quería llegar a la cumbre más alta del mundo".
Rojas motivó al público a enfrentar sus miedos y escalar sus propias montañas. "Subir y bajar montañas saca lo peor y lo mejor de uno", aseguró.
Finalmente, el músico y neurocientífico Esteban Gutiérrez le jugó una broma a la audiencia. Hizo creer que invitaba a seis voluntarios al escenario a participar de una dinámica musical cuando en realidad se trataba del grupo argentino Vox Pop que interpreta canciones completas (voz e instumentos) a capella.
AC-DC, Queen y Elvis Presley fueron parte del repertorio de este grupo que Gutiérrez utilizó para ejemplificar el reflejo musical emocional.
La agrupación también tendrá una presentación en el TEDx Joven Pura Vida.
Segundo bloque dedicado a "nuevos enfoques". Escoltada por sus hijos, la escritora Henrietta Boggs -quien fuera la esposa de Pepe Figueres- subió al escenario para darle un mensaje a todas las mujeres. La estadounidense, oriunda de Alabama y con 97 años, contó que vino a Costa Rica a visitar a sus tíos. "Vine buscando aventura", dijo.
"En esos años, en 1940, las mujeres no usaban pantalones. Solo las estrellas de Hollywood los usaban", relató Boggs y continuó: "Costa Rica era bastante conservadora. Hombres y mujeres no podían salir sin chaperón. Mi chaperón era un niño de siete años, sobrino del novio, a quien le dábamos chocolates para que no contara lo que había visto".
En esa Costa Rica, las mujeres no votaban. "Entonces le dije a mi marido (Pepe Figueres), ¿cómo puede ser que, en el Siglo XX, las mujeres no votan? ¿A esto le llamas democracia, cuando la mitad de la ciuddanía no vota?", recordó Boggs.
"Les cuento un secreto, creo que él empezó la revolución del 48 solo para calmarme", dijo Boggs y el auditorio Coca Cola reventó en carcajadas.
Boggs tomó aire para su último mensaje: "Hay que librar a las mujeres de la violencia y creo que los chiquitos del futuro van a ganar esa revolución".
Iván Duque, senador colombiano, hizo un recuento de innovaciones políticas que inició con Aristóteles hasta la Revolución Francesa, incluyendo los logros científicos y tecnológicos de Alan Turing y Steve Jobs.
"¿Con cuál letra P quieren que se escriba la política? ¿Con la P de podrida o la P de pulcritud?", interpeló a la audiencia. "La primera innovación política está en el poder de uno", sentenció Duque y agregó: "Esa política también necesita un ciudadano distinto. Enfrentar la P que está podrida no es tarea fácil".
Guillermo Cecchi, neurocientífico argentino, empezó su charla con una pregunta: ¿hacia dónde va la conciencia?
Cecchi y su equipo ha analizado la producción cultural desde La Biblia, pasando por Homero con su Ilíada y Odisea, hasta aterrizar en el Siglo XX. Esto con el fin de relacionarlo con los procesos de introspección, entendidos estos como la capacidad de razonar sobre nosotros mismos tanto en lo cognitivo como en lo emocional.
En todos, los investigadores notaron que lo intropectivo aumentaba hasta que caía abruptamente cuando coincidía con momentos de inestabilidad social como la caída de la edad de oro griega, las guerras mundiales y el fin del milenio en el año 2000.
Sin embargo, Cecchi continuó con su análisis y encontró otra caída en el 2008.
"¿A qué se debe? A la adopción masiva de la palabra escrita. La lectura propicia el diálogo interno y los medios digitales y sus interacciones están cambiando la lectura tradicional desde 2005", dijo Cecchi.
"La introspección nace de la desconexión de uno con el mundo exterior. El mundo digital disuelve esas barreras", explicó el neurocientífico.
"No escogimos ser Homo sapienes y tampoco tenemos control sobre convertirnos en Homo digitalis", dijo Cecchi y agregó: "Entonces, ¿hacia donde va la conciencia?".
Con la audiencia en silencio, concentrada en su última frase, Cecchi concluyó: "Para no ser tan amargado como Aristóteles, mi recomendación es crear nuevas formas de conocimiento e introspección aparte del mundo digital".
Esta tarde también expusieron Camelia Ilie-Cardoza, profesora de liderazgo y Pilar Manchón, científica emprendedora; así como Mario Chacón y Daniel Moreno, comediantes de La Media Docena, quienes impregnaron de humor el cierre del segundo bloque del TEDx Pura Vida.
Tercer bloque dio un vistazo a otros ambientes. En el último bloque de TEDx Pura Vida, la química Yajaira Sierra llevó a la audiencia hasta Marte. Bueno, más bien, a un Marte en la Tierra.
Ella participó en una simulación terrestre para ensayar tecnologías y riesgos fisiológicos de un eventual viaje al Planeta Rojo. Entre lo que se pretendía medir eran las dinámicas psicosociales de la tripulación.
"Estábamos en un hábitat inhóspito y la cohesión de grupo fue esencial para la sobrevivencia", dijo Sierra.
La química puertorriqueña convivió en un espacio pequeño con cuatro extraños por cuatro meses. "No había espacio personal", contó Sierra.
Sin embargo, como latina, Sierra no se sintió extraña en esa dinámica. A fin de cuentas, las circunstancias son muy similares a la vivida en muchos hogares latinoamericanos. "Los componentes socioculturales de la resiliencia me ayudaron a vivir una buena vida en Marte", comentó Sierra y agregó: "Quizá América Latina nos enseñe a vivir la buena vida en Marte".
La bióloga tica Laura May Collado también subió al escenario de TEDx Pura Vida para hablar de contaminación acústica y su impacto en los ecosistemas.
"¿Es difícil comunicarse con tanto ruido, verdad? El enmascaramiento del paisaje acústico es uno de los mayores contribuyentes a la pérdida de biodiversidad", dijo May.
Los animales utilizan el sonido para comunicarse, advertir la presencia de depredadores, avisar donde se encuentra comida e incluso con fines sociales como cohesionar al grupo y atraer a las hembras.
Sin embargo, nuestras costas están altamente urbanizadas y el ruido se ha vuelto cada vez más común. "Incremento de sonido de motores en el agua, en apenas dos generaciones de delfines, no ha dado tiempo a que estos se adapten", explicó la bióloga.
May aprovechó para concientizar sobre la importancia de mantener los espacios marinos y terrestres libres de contaminación sonora. "La voz de la naturaleza es clave en nuestra sobrevivencia", manifestó.
El último en tomar el micrófono fue el futurista Juan Enríquez. "Caminemos hacia adelante, que nos alcanza el futuro", dijo.
Para Enríquez, las tres palabras que se le deberían decir a un recién graduado para que se adapte al fururo son "código de vida".
Actualmente, los avances científicos y tecnológicos permiten leer, copiar y editar el código de día. "Quizá algún día podamos hasta editar a los políticos", bromeó.
Esos avances están encaminando al ser humano a la era del diseño inteligente. "Aunque suena espantoso y antinatural, eso nos ha ayudado a curar enfermedades, hemos duplicado la esperanza de vida y estamos dándole de comer a siete mil millones de personas", dijo Enríquez.
Según el futurista, el ser humano está dándole vuelta a las teorías de la evolución al modificar ese código de vida. "Un campo de trigo o maíz es uno de los espacios con menos selección natural de planeta", dijo.
Para Enríquez, las modificaciones del código de vida implican responsabilidad y por tanto, se requieren principios éticos que celebren la diversidad, respetar a otros, conservar un 25% de los ambientes donde siga funcionando la selección natural y la educación.
Además de ellos, esta noche expusieron George Miller-Ramos, Álvaro Cubero, Jacques Sagot y Sonia Marta Mora.
Un día para los jóvenes. La experiencia del TEDx no se limitó a este jueves. El TEDx Pura Vida Joven será este viernes en el mismo lugar y horario. Esta vez, nuevos expositores tomarán el micrófono para contagiar a otros con sus ideas sobre pasión, colaboración y acción.