Estudiantes compitieron con robots, ansiedad y neuronas

Certamen de robótica congregó a 420 participantes de todo el país

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Con pequeñas máquinas de 25 centímetros de largo y de ancho, estudiantes resolvieron problemas típicos de una misión espacial, en el marco de la V Olimpiada Nacional de Robótica, organizada por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt).

Allí, los estudiantes construyen y programan un robot que les permita resolver una tarea específica.

Por un mes, Mariela Hernández, Jeremy Caldwell e Isaac Hong se prepararon para el reto junto con su profesora, Alejandra Sánchez.

Ese equipo se inspiró en un modelo de Taiwán al que modificaron debido a la cantidad de piezas disponibles en nuestro país.

“Hemos ganado mucha experiencia porque prácticamente comenzamos desde cero”, dijo Hernández, a lo que Caldwell agregó: “Aquí hay muchos grupos que llevan varios años en olimpiadas y ya tienen bastante experiencia. Esta es nuestra primera vez”.

Ellos representan al Colegio Científico de San Pedro y llegaron a la final ayer para competir con otros nueve equipos en su categoría, a lo largo de tres rondas.

Como ellos, unas 420 personas conforman los equipos, incluidos estudiantes y profesores. Los equipos compiten en cuatro categorías, que van de los 7 a los 23 años.

Familiares y amigos se congregaron en el Hotel Crowne Plaza, en San José, donde la actividad tuvo lugar el sábado y el domingo.

Dificultades. En medio de la ronda de preparación, alguien ajeno a la organización cambió el nivel de iluminación del salón, con lo que varios robots se desorientaron. Por fortuna, esto sucedió antes de la competencia, por lo que los organizadores simplemente dieron más tiempo a los equipos para recalibrar los sensores.

El cambio de iluminación sacó a relucir un desperfecto en los sensores de luz del robot del equipo de San Pedro, con el que se le dificultaba orientarse en el terreno.

Justo antes de la primera ronda de competencia, los muchachos debieron crear una estrategia para completar su tarea: reparar un panel solar de una estación espacial.

La calificación de los jueces se basa en el logro de objetivos y en el tiempo utilizado. Estos incluyeron reorientar celdas solares desorientadas, reemplazar las defectuosas y ubicarlas en un lugar distinto.

Arys Carrasquilla Batista, coordinadora de esta edición, acumula experiencia en este tipo de eventos desde 2011, y comentó que el evento “ha crecido mucho, primero en la cantidad de participantes, y en las categorías porque en ese momento solo hicimos categoría C”.