Científicos divisan dos supernovas muy lejanas

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Londres. EFE Un equipo de astrofísicos australianos detectó las dos supernovas más alejadas de la Tierra, un descubrimiento que acerca a los científicos a la observación de las estrellas que se formaron inmediatamente tras la explosión conocida como Big Bang .

Según revelaron los investigadores en un artículo publicado en la revista científica Nature , ambos astros son supernovas superluminosas; es decir, tienen un brillo hasta cien veces superior al de una supernova normal.

Al momento de la explosión que les da origen, esas estrellas emiten más luz que la que producirá el Sol si llegase a cumplir los 10.000 millones de años de existencia que prevén los científicos.

Según explicó el investigador Jeff Cooke, de la Swinburne University of Technology de Hawthorn (Australia), este tipo de supernova es extremadamente rara de encontrar, y hasta ahora solo se había detectado una en el 2007, situada mucho más cerca de la Tierra que las dos recién descubiertas.

Los astros observados por Cooke son el producto de la muerte de un par de estrellas muy masivas, de entre 100 y 250 veces la masa del Sol, que explotaron de una manera completamente diferente del resto de supernovas y con una gran intensidad.

De hecho, la explosión de una sola de estas supernovas tenía el poder de detener el proceso de formación de un conjunto significativo de estrellas o, por el contrario, proporcionar el material necesario para acelerar este fenómeno.

“Pueden ser las portadoras de la muerte o las portadoras de la vida para las otras estrellas”, apuntó Cooke, en cuyo equipo figura también el investigador argentino Carlos Gonzalo Díaz.

Los científicos concluyeron que esas supernovas se formaron hace aproximadamente 12.000 millones de años, en una época en la que el universo era tres veces más pequeño . Por ello, su hallazgo sugiere que la formación de superluminosas era más frecuente en las primeras etapas de la historia del universo.