El primer contacto de los adolescentes con la pornografía se produce a los 12 años, sobre todo a través de videos y de búsquedas en Internet.
Así lo evidenció un estudio con colegiales del Área Metropolitana hecho por investigadores de la Clínica del Adolescente del Hospital Nacional de Niños.
El trabajo encuestó a 1.353 jóvenes de 10 colegios josefinos en julio del 2005.
Los datos se terminaron de procesar a finales del 2006.
Los muchachos completaron un formulario con 111 preguntas sobre temas como sexualidad, tabaquismo y alcohol.
Esta es la tercera encuesta sobre adolescentes de esa clínica, y por primera vez se consultó sobre acceso a pornografía.
De los jóvenes encuestados, 58 de cada 100 reportó haber tenido acceso más de una vez a materiales prohibidos para menores.
La edad promedio de inicio (primera vez que se vio material pornográfico) es los 12 años.
Sin embargo, hubo jóvenes que reportaron haberla visto por primera vez incluso mucho antes de esa edad.
La investigación halló que es a partir de los 11 años cuando se da un incremento en el número de adolescentes que tienen acceso a la pornografía.
Edades. Además, un 78% de los adolescentes que se exponen a la pornografía por primera vez, se ubican en la adolescencia temprana (10 a 14 años); el 22% restante está en la adolescencia media y tardía ( mayores de 15 años).
Los videos e Internet son los medios de mayor acceso entre esta población, que está muy inclinada a las imágenes y los medios interactivos.
“En esta etapa los jóvenes se encuentran focalizados en sus cambios físicos, y la pornografía los lleva a reforzar únicamente las zonas genitales, sin importar las relaciones afectivas, el intercambio afectivo, el disfrute compartido, el respeto por el otro y la percepción de la mujer como un objeto, una cosa utilitaria para sus fines únicamente”, advirtió Alberto Morales, director de la Clínica del Adolescente
Advirtió que esto se agrava cuando se analiza que los jóvenes encuestados refirieron mirar pornografía solos (un 62 % reportó esta práctica).
“La situación adquieren un carisma de alarma donde nuestra juventud se mueve en la falta de acompañamiento de adultos responsables, que le permitan seguir un camino correcto respecto a la sexualidad, que de por sí ya se les presenta distorsionada desde nuestro sistema educativo y espiritual”, alerta el informe.
Los datos del trabajo serán entregados a autoridades de educación y salud para mejorar las políticas hacia los jóvenes.
Educación. Morales insistió en la necesidad de una mejor educación sexual y de controles estrictos de los padres, educadores y de la legislación sobre el tema.
El desconocimiento en materia de sexualidad es alto entre los adolescentes, según halló esta misma encuesta y fue divulgado el año anterior por los investigadores.
El estudio mostró que solo el 15% de los estudiantes de sétimo a undécimo año identifican correctamente las medidas para prevenir males de transmisión sexual, entre otros vacíos.