Un grupo de 150 escolares se encargaron de plantar 500 árboles de guachipelín, calistemo,´orgullo de la India´ y 'eugenia´, como parte de un proyecto para mejorar la calidad del aire en Heredia.
Esta mañana, sus laboriosas manos trabajaron la tierra en las instalaciones del Camposanto La Piedad de Heredia con la colaboración de escolares de Santa Cecilia de esa ciudad florense.
“El objetivo es lograr que los niños de la comunidad adquieran conciencia ambiental", dijo Gloriana Carvajal, jefe de Mercadeo de ese camposanto.
Todos los árboles cultivados son nativos de esa región herediana, precisamente, los estudiantes recibieron primero una charla con personeros del Inbioparque sobre el valor de esas especies y la importancia de conservar el ambiente.
Los expertos del Inbioparque recordaron que los árboles favorecen la captación de contaminantes como dióxido de carbono y polvo; la producción de oxígeno; además de que se mejora el clima mediante el control y la regulación de la temperatura y la velocidad del viento.
De igual forma, los árboles ayudan a proteger las cuencas y cuerpos de agua; mejoran los suelos, evitando la erosión, y proveen nicho y hábitat para fauna silvestre especialmente las aves.