Productores de café crecen de forma sustentable con impulso de McDonald’s

Arcos Dorados, franquicia que opera la marca McDonald’s en América Latina y el Caribe, se ha convertido en un importante apoyo para los caficultores que desarrollan su producción de forma sostenible, ya que les brinda la seguridad de un mercado fijo y reconoce su calidad adquiriendo café de primera.

A través de la historia de la empresa en el país se ha impactado a familias que, día con día, labran la tierra, cuidan sus reses y granjas para suministrar insumos con la más alta calidad y frescura, lo que da como resultado que McDonald’s pueda decir que los insumos que se utilizan en sus cocinas son producidos en Costa Rica.

— Esteban Sequeira, director general de Arcos Dorados Costa Rica.

El impulso de empresas como McDonald’s “ha tenido un impacto muy importante, no solamente por el precio que nos pagan sino por la sostenibilidad que nos ofrecen… nos dan un mercado fijo, un mercado bueno que nos obliga a implementar una serie de cosas que son muy buenas para nosotros, para ellos como receptores de nuestro producto y para el entorno”, asegura Miguel Badilla, caficultor de Santa María de Dota.

Badilla posee una finca de 18 manzanas, de las cuales alrededor de 12 destina al cultivo de café de forma amigable con el ambiente, para lo cual cumple con dos certificaciones, la primera de ellas es la Rainforest Alliance, que impulsa la producción agrícola sostenible y cadenas de suministro responsables.

“Yo soy parte de Rainforest (Alliance) desde hace 16 o 17 años, desde que Coopedota inició con esta certificación… y ha significado un ingreso extra que ha sido, sobre todo en los últimos años, muy importante”, explica este agricultor que desde 1986 pertenece a esta cooperativa de productores de café.

Como parte de esta certificación, Badilla ha hecho inversiones en su finca, pero destaca que “más que nada es retomar costumbres que nuestros antepasados tenían, como la no aplicación excesiva de químicos, seleccionar muy bien los químicos a utilizar, aplicarlos en función de monitoreo y no de recetas”, así como eliminar de la mejor forma los desechos.

En la finca de Badilla los envases de químicos se desechan después de un triple lavado, de perforarlos para que no sean reutilizados y se llevan sin tapa al centro de acopio de Coopedota, donde se les extiende un recibo y se puede cumplir con la trazabilidad de estos envases.

De igual manera, en la certificación Rainforest Alliance “lo más importante es el manejo con relación a la parte administrativa, al ser amigables con el ambiente y además tener a los colaboradores de la mejor forma posible, con todas sus garantías, con todas sus condiciones de trabajo apropiadas y con un salario justo”, agregó.

Durante la cosecha, este caficultor da empleo a unas 15 personas a quienes brinda en los lugares donde viven agua potable, piso de cemento, ventilación, electricidad y condiciones adecuadas para que preparen sus alimentos sin perjuicio para ellos ni para el medio ambiente, detalló.

Badilla cuenta además con la certificación Calidad Coopedota, con la cual cumple requisitos que tienen que ver con variedades de café, puntos de maduración, registro contable, registro de aplicaciones, control de los productos que se utilizan y manejo de aguas residuales de las habitaciones de los colaboradores, entre otros.

Enamorado de su profesión, este caficultor trabaja y siempre aspira a mejorar para que él y sus colaboradores sigan creciendo en equilibrio. Además, afirma con orgullo que “mis hijos son profesionales gracias a esto, mi familia tiene salud gracias a esto y me doy mis gustos gracias a esto”.

La producción en la finca de Badilla ronda las 360 fanegas por año, las cuales se entregan en su totalidad a CoopeDota, en cuyo beneficio se procesan de forma separada cumpliendo con la trazabilidad requerida por la certificación de Rainforest Alliance y por compradores como McDonald’s.

Miembro de la cuarta generación de su familia que produce café, este agricultor resalta el hecho de que McDonald’s, siendo una franquicia internacional, utilice productos de Costa Rica. “Creen en nosotros y respaldan esa calidad con buenos precios, con promoción, y terminan siendo unos excelentes socios en nuestro camino productivo”, concluyó Miguel Badilla.