Siempre que arranca un nuevo campeonato se vuelve sobre lo mismo, los récords, los registros y las marcas que un jugador o un equipo podrán derribar durante el torneo. Tumbar el registro de goleo histórico de Víctor Núñez será muy difícil a corto plazo, pero quitarle el promedio de goles por partido a Daniels o Saborío será aún más. Conozcamos a cada uno.
El nombre de Errol Daniels aparece en 1962. El máximo romperredes en la historia de la Liga Deportiva Alajuelense apenas jugó 10 temporadas, pero se cansó de merodear las porterías rivales, anotando 196 tantos en total, incluida una temporada en 1967 donde él solo se ingenió para hacer 41 goles. Todo un depredador del área, fue campeón de goleo en seis ocasiones, cinco de ellas de forma consecutiva. Así que, nadie puede negar su calidad como atacante.
Para 1999 aparece un muchacho de República Dominicana que pintaba bien y del que se hablaban cosas buenas en el Saprissa, club donde nació futbolísticamente hablando. Sin embargo, le costó adaptarse al equipo, así que lo enviaron a Limón y a Santa Bárbara a préstamo, antes de que lo reclamaran de nuevo pensando que ya estaba listo. Hizo algunos buenos partidos, pero solo concretó nueve goles y se marchó de Tibás.
Dejó a los morados y pronto el nombre de Víctor Mambo Núñez empezó a figurar en clubes como Alajuelense y Cartaginés, en donde consiguió varias anotaciones. Su mejor momento lo vivió en el Herediano ya casi en el ocaso de su carrera, sus últimos cinco años para ser exactos, en donde enamoró al aficionado con goles y el regreso de títulos para el equipo, inmerso en una enorme sequía de ellos entre 1993 y 2012. Campeón de goleo en varias ocasiones, el “Mambo” llegó a 246 totales en su carrera, 30 más que Errol.
El otro integrante de esta nota es Álvaro Saborío, con muchos menos goles que los otros dos (124), pero con un promedio muy alto de anotaciones por juego. Saborío se marchó de la liga local en 2006 cuando tenía 95 tantos con el Saprissa y tuvo un éxodo muy prolongado hasta su regreso a la Liga de Ascenso con San Carlos. En las dos últimas campañas volvió a la máxima categoría con los norteños y fue el goleador del cuadro sancarleño.
Es aquí donde debemos sacar la calculadora y para ver porcentajes y conocer cuál es el más efectivo.
Promedio de Errol Daniels: jugó 242 partidos y anotó sus famosos 196 goles; eso le da un promedio de 0.8 goles por juego.
Promedio del Mambo Núñez: 530 juegos y 246 goles; 0.46 goles por juego
Promedio de Álvaro Saborío: Jugó hasta el día de hoy 205 juegos y lleva 124 goles, eso quiere decir que su promedio de goles es de 0.6 goles por juego. En el caso de Saborío hablamos solo de partidos jugados en Primera División, ya que jugó una campaña en la segunda categoría.
¿Entonces por dónde nos vamos?
El frío número dice que el máximo artillero de todos los tiempos es Víctor Núñez, pero si lo ‘descuartizamos’ un poco, el porcentaje le pertenece a Daniels y en un segundo lugar muy cercano y con posibilidad de superarlo, está Saborío.
¿Qué vale más para ustedes, la cantidad de goles o el promedio de goles por juego? Elijan a uno.