Los Ángeles. AFP El cineasta estadounidense Woody Allen comparó la frustración que le provocan sus películas con el sentimiento de un chef disgustado con la cocina que prepara. Según dijo, nunca está satisfecho con sus obras y detesta todas sus películas.
Así lo manifestó el director de cine en entrevistas en Los Ángeles, ciudad a la que llegó para promocionar To Rome with Love, filme que ya llegó a Estados Unidos, después de haber sido lanzada en Italia en abril de este año.
A las salas latinoamericanas la cinta llegará la próxima semana.
Durante su visita a Los Ángeles, Allen recordó su filmografía con su particular humor autocrítico.
“Nunca he estado satisfecho y jamás aprecié ninguna de mis películas. Hice la primera en 1968 ( Take the Money and Run ) y nunca la volví a ver”, manifestó el controversial cineasta de 76 años.