Vuelta a España fue fusilada por el Pistolero

El español volvió como los grandes luego de dos años de estar suspendido

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MADRID - AFP El español Alberto Contador ganó ayer la Vuelta Ciclista a España 2012, mientras que el alemán John Degenkolb se adjudicó la 21.ª y última etapa de la ronda, que se disputó entre Cercedilla y Madrid, con un recorrido total de 115 kilómetros.

Esta vuelta se caracterizó por un recorrido montañoso, en el que se distinguieron locales. El podio fue ocupado por tres españoles. Además de Contador, se subieron Alejandro Valverde y Joaquim Rodríguez, a 1 minuto y 16 segundos y 1 minuto y 37 segundos, respectivamente, del corredor de Pinto.

Condenado a una suspensión de dos años por el Tribunal Arbitral del Deporte (TAS) de Lausana después de dar positivo por clembuterol, un esteroide, Contador volvió a la competición el pasado 6 de agosto, por lo que no ha estado mucho tiempo sin ganar.

El ciclista, que nunca dejó de clamar su inocencia en este caso alegando la hipótesis, un poco rocambolesca, de un filete de carne contaminada, regresa al primer plano en la primera gran vuelta que disputa después de la sanción.

Una victoria que le permite también ampliar un palmarés que quedó amputado con la sanción por dopaje, ya que además de la suspensión de dos años (finalmente estuvo sin competir durante seis meses porque el resto se aplicó de manera retroactiva), le quitaron el Tour de Francia 2010 y el Giro de Italia 2011, pruebas que había ganado.

Pese a todo, en el discurso de la victoria de Contador, de 29 años, no se atisba ninguna señal de rencor o de rabia, sino más bien una felicidad serena pero justa.

“Estoy contentísimo. Siento una liberación por toda la presión que me he metido”, declaró el ciclista el sábado al finalizar la penúltima etapa, ya como ganador virtual de la Vuelta, una carrera que logra por segunda vez en su carrera (tras la vuelta a España del 2008).

El Pistolero, por su manera de festejar las victorias –haciendo como que dispara con las manos–, desea olvidar el pasado y prefiere hablar de futuro y de renacimiento, aunque con mayor prudencia que antes de la suspensión.

“El triplete Giro-Tour-Vuelta era un objetivo que me planteaba antes. Pero con toda la presión que supone, prefiero meterme en una cosa más determinada”, explicó el pistolero Contador.