¿Cuál era el objetivo de la reunión con el Canciller?
Nos pareció urgente ir concretando y afinando mecanismos de coordinación, de cara a un eventual referendo en diciembre, que implicaría, por mandato de ley, el voto de los costarricenses en el exterior. Hay pasos que urgen: uno es abrir el empadronamiento para que estas personas pasen de estar inscritas en una localidad costarricense al consulado más cercano de donde se encuentran.
¿Cuándo abrirían el proceso de empadronamiento?
Tendría que ser pronto para que estos costarricenses dispongan de al menos un mes y medio para hacer el trámite.
“Este primer paso requiere amplia difusión y vamos a echar mano de Internet, no solo con listas de correos y las páginas web, sino también con las redes sociales”.
¿Cuál sería el procedimiento de votación?
La idea es utilizar un mecanismo lo más sencillo posible para bajar los costos y la complejidad logística del proceso. El punto inicial era el enlace permanente con la Cancillería y lo siguiente es difundir cuanto antes la apertura del empadronamiento.
¿Qué tienen que presentar las personas para empadronarse?
Nada más allá de la cédula de identidad, si la tiene. Si no, debe solicitarla en el consulado señalando esa sede como sitio de votación.
Hay muchos detalles por afinar y el calendario está corriendo. ¿Podrán realmente tener listo esto para el 5 de diciembre?
Precisamente, la idea es iniciar las coordinaciones y trabajar aceleradamente porque no nos podemos permitir, como país, decirles nuevamente a los costarricenses en el extranjero que no pueden participar en la consulta.