Un árbol de Navidad enorme brillará en la coreografía ‘El Cascanueces’

Se lanzaron al agua La decisión de cambiar este importante elemento de la escenografía se dio para darle más magia al esperado montaje

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Un árbol de Navidad hecho con tela y que mide más de ocho metros de altura es el nuevo miembro del ballet El Cascanueces , que se presentará del 5 al 15 de diciembre en el Teatro Nacional.

Así lo dijo Patricia Carreras, una de las coreógrafas del montaje, quien agregó que la decisión de cambiar este elemento surgió para darle más magia al trabajo.

“La producción debe de estar innovando no solo en la coreografía, sino también en la escenografía y, bueno, por algo debemos de empezar”, comentó la maestra.

El Cascanueces utilizó, desde el 2009, un árbol de Navidad que era prestado por la Fundación de Amigos del Teatro Nacional.

“Esta organización lo presta también a gente que hace montajes en Panamá, entonces decidimos tener uno propio”.

Características. Jorge Camacho, quien estuvo a cargo del diseño, comentó que hay muchas diferencias notables entre el viejo y el nuevo árbol.

Una de ellas, es el color. El nuevo está muy enfocado en el rojo para hacer referencia a la pasión, y los diferentes tipos de verde para resaltar la naturaleza. “También tendrá el blanco para darle como cierto toque de nieve, sin exagerar”.

“El que se ha utilizado hasta ahora, tiene verdes más tirando a musgo, más gris. Es como más muerto”, agregó Camacho.

Además, para darle más vivacidad, el árbol tiene cerca de 2.000 luces, tipo LED. “Eso ayuda a ahorrar energía y es más práctico. Las bombillas son independientes, por decirlo de alguna manera; eso significa que si una se quema, no es que el árbol se va a apagar”.

En cuanto al material que utilizaron para hacerlo, Camacho apuntó que es una tela especial. “Es una lona especial, conformada por fibras de nailon, que es muy pesada (200 libras, más o menos)”.

El diseñador y arquitecto –en conjunto con tres colegas más– trabajan en este proyecto desde mayo. “Es un trabajo pesado, pero diferente. Queremos que quede lo más mágico posible”.