Puente de Incurables necesita seis semanas más de obras

El sábado se habilitó un segundo carril, en sentido San José-Guadalupe

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El puente de los Incurables aún necesita seis semanas de trabajo para que estén habilitados los cuatro carriles de la estructura, ubicada en el límite entre barrio Aranjuez y Guadalupe.

Así lo confirmó Christian Vargas, gerente de Conservación del Consejo Nacional de Vialidad.

El ingeniero explicó que ya se ha completado el trabajo de reforzamiento de las placas de fundación del puente (al final de los dos bastiones).

Ese reforzamiento incluyó el ensanchamiento de las fundaciones con más concreto y acero.

Lo que procede ahora, agregó Vargas, es trabajar en la parte superior del puente (la superestructura), que incluye aceras, barandas y la carpeta de rodaje.

Ese trabajo se desarrolla en el paso elevado más nuevo, que va de Guadalupe a San José.

Por otra parte, el fin de semana, el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) arregló el relleno que colapsó en el otro puente paralelo (en el sentido San José-Guadalupe).

Eso permitió habilitar los dos carriles de la estructura desde la tarde del pasado sábado.

Vargas señaló que se sustituyó el viejo relleno, que estaba constituido por material de mala calidad y escombros.

Además, se cavó hasta las fundaciones del puente para reforzarlas. Por último, se cubrió con una nueva carpeta de asfalto, con una base estabilizada en cemento.

Las obras para mejorar el primero de los puentes comenzaron el 26 de marzo pasado, cuando el Conavi anunció obras para mejorar la estructura por la que circulan 45.000 vehículos diarios.

El costo original del trabajo es de ¢500 millones.