La compra de Kativo (Protecto y Glidden) por parte de la colombiana Pintuco deja en evidencia que los suramericanos están dispuestos a subirle el tono a la competencia en Centroamérica, en el negocio de las pinturas.
Con esta inversión de $120 millones, el fabricante aplicó un segundo brochazo a su plan de extenderse por el Istmo. Ya en octubre había adquirido la marca Vastalux.
Luego de estos dos movimientos, el mercado costarricense, y el centroamericano en general, queda en manos de cuatro competidores: Pintuco, Sur, Comex y Lanco.
Fue la semana pasada cuando Pintuco (propiedad de Grupo Mundial) cerró la compra de Kativo, hasta hace poco unidad de la estadounidense H.B. Fuller.
En entrevista telefónica con La Nación , ayer, Ernesto Fajardo, presidente de Grupo Mundial, explicó que la adquisición responde a la necesidad de la compañía por ampliar su presencia en el Istmo, al que considera un mercado natural para Colombia.
“Estar en Centroamérica nos permite tener liderazgo en el negocio de las pinturas y nos ayuda en el posicionamiento de la empresa”, indicó. Añadió que su compañía valoró también la rentabilidad de Kativo, firma que en el 2011 generó ingresos por el orden de los $113,5 millones por sus ventas en la región centroamericana.
Grupo Mundial tiene presencia en 11 países latinoamericanos y una planilla de 4.300 empleados.
Los competidores. En la acera del frente la noticia de la venta no tomó por sorpresa a los representantes de Sur, Comex y Lanco.
Eduardo Fumero, vicepresidente Comercial de Sur, aseguró que esta empresa de factura nacional se enfoca en el traslado de su planta.
En un plazo de tres años, Sur dejará su actual ubicación de 53.000 metros cuadrados, en La Uruca, por una propiedad tres veces más grande en El Coyol de Alajuela.
Al mismo tiempo, aseguró que la empresa cuenta con puntos de venta en los diferentes países del Istmo, donde distribuyen las marcas Sur y Koral. En total, la firma tiene una planilla de 2.600 empleados.
Arturo Mercadillo, director de Comex para Latinoamérica, destacó la presencia de la marca desde Canadá hasta Panamá como una de sus principales fortalezas frente a la competencia.
Ignacio Osante, gerente general de Lanco, dijo que invierten en la compra de nueva maquinaria para expandir su negocio en Costa Rica y en la región. Desde su llegada al país, en el 2001, esta firma de origen puertorriqueño ha invertido aquí más de $20 millones.