La Municipalidad de San José destinó este año alrededor de ¢10 millones para las actividades católicas de Semana Santa en la capital.
El director de protocolo del gobierno local, Jorge Villalobos, confirmó el monto invertido. Aclaró que el dinero se utiliza para cubrir los gastos de actores y participantes en las diversas actividades, flores, vestuario y otras planillas.
En la recreación de la Santa Cena, que se realizará hoy por la noche, participarán 114 actores, de los cuales 36 son profesionales.
Villalobos aseguró que solo algunos reciben paga y que los actores profesionales ganan entre ¢30.000 y ¢50.000 por la semana.
Aunque se trata de un convenio verbal con la arquidiócesis, el funcionario indicó que el presupuesto destinado a las procesiones (incluido como parte del plan operativo) aumentó, en promedio, un 10% cada año desde el 2007.
Según manifestó el alcalde josefino, Johnny Araya, el Domingo de Ramos, desde hace cuatro años la Iglesia Católica llegó a un convenio con el gobierno local para el financiamiento parcial de las actividades durante la semana mayor.
“La Municipalidad está muy involucrada en la celebración de la Semana Santa. Prácticamente toda la parte cultural y artística está a cargo de la Municipalidad”, dijo.
Araya aseveró que las representaciones artísticas y culturales contribuyen a que la población tenga interés de asistir a San José durante la Semana Santa.
Para el director de protocolo, San José era una ciudad muy solitaria durante esta semana. Añadió que la afluencia de personas beneficia a los comercios.
Opiniones divididas. El artículo 75 de la Constitución Política estipula que la religión oficial del Estado es la católica y que, por tanto, este contribuye a su mantenimiento.
En criterio del abogado constitucionalista José Miguel Villalobos, el derecho a no ser discriminado por razones religiosas es una norma de mayor jerarquía.
El jurista afirmó que no es correcto que los municipios recauden impuestos para destinarlos a una agrupación religiosa, pues no todos sus habitantes comparten las mismas creencias.
Pero los diputados evangélicos Justo Orozco (Partido Renovación Costarricense) y Carlos Avendaño (Partido Restauración Nacional) coincidieron en que el aporte de recursos municipales para actos religiosos es una práctica sana.
Ambos concuerdan en que las demás religiones también deberían beneficiarse.
Ayer, se confirmó que las diócesis de San Isidro de El General, Limón y Puntarenas no recibieron financiamiento municipal para la celebración de la Semana Santa.
Sin embargo, no fue posible hablar con representantes de Cartago, Tilarán y Ciudad Quesada.