La idea de este método fue explorada anteriormente por otro proyecto de la Universidad de Costa Rica.
En este caso, se utilizó un algoritmo para analizar y diferenciar el canto de la rana Diasporus hylaeformis y aquellas del género Alytes.
Al igual que con las corvinas, se midió el volumen, el timbre y el tono del canto para identificar las llamadas de un individuo principal.
Luego, se calculó la sonoridad de la señal con el propósito de reconocer dónde estaban los tramos del individuo principal y se contrastó con el timbre.
Los resultados del programa tuvieron un 90% de acierto.
Este proyecto también estuvo a cargo de Arturo Camacho, quien trabajó con los biólogos Federico Bolaños y Adrián García.
No obstante, el sistema informático de peces es el primer software de reconocimiento para una especie neotropical.