Menos calorías no garantizan más vida

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Londres, EFE La restricción calórica, un tipo de dieta que consiste en ingerir menos calorías que las recomendadas, no alarga la esperanza de vida pero mejora la salud.

Así se desprende de un estudio realizado en monos y publicado por la revista científica Nature .

La restricción calórica es la práctica de limitar la ingestión de calorías diarias entre un 10% y un 40% con la esperanza de mejorar la salud y retrasar el envejecimiento, una tesis que estudios previos habían probado en roedores.

La investigación fue iniciada hace 23 años por un grupo de científicos del Instituto de Envejecimiento Estadounidense ( National Institute on Aging) de Baltimore (EE. UU.) y rechaza que esta dieta tenga capacidad para alargar la vida, al menos en los monos, aunque sí reconoce sus efectos positivos sobre la salud de estos animales.

Los científicos, dirigidos por el biólogo español Rafael de Cabo, redujeron en un 30% la ingestión de calorías de monos Rhesus ( Macaca mulatta ) y evaluaron los efectos de esta dieta en ejemplares de distintas edades y sexo.

Concluyeron que su esperanza de vida, que habitualmente alcanza los 27 años, no se incrementó ni entre los monos mayores, de entre 16 y 23 años en el momento de iniciar la dieta, ni entre los más jóvenes, menores de 14 años cuando comenzó el experimento.

En cambio, los investigadores descubrieron que la restricción calórica sí aportó algunos beneficios al metabolismo de estos primates.

“Observamos una mejora general en parámetros asociados con enfermedades típicas del envejecimiento, como las metabólicas (diabetes, obesidad), las cardiovasculares y el cáncer”, explicó De Cabo.

En particular, los monos que comieron un 30% menos de calorías presentaron niveles más bajos de triglicéridos, colesterol y glucosa, especialmente entre los machos.

También se dio, una incidencia “notablemente menor” de cáncer entre los primates más jóvenes.

La investigación, que, según De Cabo, podría prolongarse aún durante otras dos décadas, se centra ahora en averiguar las claves metabólicas y moleculares responsables de los efectos de la restricción calórica sobre el organismo de estos monos. “La respuesta es muy parecida a otras reacciones de estrés, por lo que podríamos considerar la restricción calórica como un estrés metabólico, que causa ajustes globales en el organismo ” , explicó el biólogo.