Luis Muñoz graba nostalgias

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Su cuerpo habita en Estados Unidos, pero su alma siempre permanecerá en Costa Rica. Luis Muñoz es un compositor y percusionista costarricense, residente desde hace 20 años en Estados Unidos, y que acaba de terminar su segunda producción discográfica llamada Compassion.

En este segundo disco, dedicado a los grandes compositores latinoamericanos que influyeron en su arte, Luis Muñoz es compositor, arreglista de todos los temas, coproductor, percusionista y tecladista.

La producción, de 10 temas, está impregnada de una amplia variedad de ritmos que van desde la samba brasileña hasta el jazz latino.

"Cada melodía refleja mis influencias, mis sentimientos de nostalgia por mi tierra y algunos recuerdos de mi niñez", aseguró el músico. "Es muy difícil para mí nombrar mis piezas, porque es música instrumental, por lo que dependen de la imaginación del que la escucha, pero con nombres como YigŸirro, Monteverde o Nicoya recorro esos paisajes e historias que viví durante los 25 años que habité en Costa Rica", agregó.

La diversidad musical se refleja también en los músicos que lo acompañaron y en los instrumentos.

El disco se trabajó con un grupo de músicos de diversas nacionalidades, entre ellos puertorriqueños, franceses, brasileños, alemanes y estadounidenses y se utilizaron más de 20 instrumentos musicales de diversas culturas.

"Me atrae la etnomusicología, el estudio de la música en las diferentes culturas, pero creo que lo verdaderamente importante son las emociones que logras transmitir, independientemente de los estilos o ritmos que utilices para ello", opinó.

Enamorado del jazz

Proveniente de una familia de músicos, en la que sus 17 tíos tocaban diferentes instrumentos y su abuelo era compositor, Luis Muñoz Quirós se enamoró de la música y dedicó su vida a crearla.

Estudió composición en la Universidad de Costa Rica y flauta en la Universidad Nacional, hasta que un día se le presentó la oportunidad de estudiar composición musical en la Universidad de Santa Bárbara, California y emigró a ese país en 1974.

Allá trabajó en arreglos musicales para documentales, vídeos, dibujos animados y anuncios publicitarios y tocaba con grupos y artistas de jazz y de rock como Etta James, Jim Messina y los brasileños Airto Moreira y Flora Burim, con los que también grabó algunos discos.

En 1994 inició su carrera como solista apoyado por el sello Farenheit Music, con el que hizo un disco llamado Los frutos del Edén, el cual se distribuyó a escala mundial y tuvo mucho éxito.

Con esta propuesta realizó una gira por Estados Unidos, en varios conciertos de jazz, hasta que en noviembre del año pasado puso en el mercado Compassion, con el que ahora está realizando una gira por California y próximamente por la costa este del país.

"Sueño con llevar mi música algún día a Costa Rica, estoy en conversaciones con Dideca para lograrlo", dijo.

La última vez que Luis Muñoz visitó nuestro país fue en el Festival de las Artes de 1994. Desde entonces, aseguró: "deseo fervientemente visitarlos y llevar mis discos bajo el brazo y en el corazón."