En el primer año de la administración Chinchilla decayó la confianza de los consumidores; no obstante, en febrero pasado cambió la tendencia.
Las expectativas de las empresas, por su parte, han bajado. Este indicador mide lo que los productores esperan que suceda con la actividad de sus empresas en los próximos meses.
Édgar Gutiérrez, director de la Escuela de Estadística de la Universidad de Costa Rica, la cual elabora el índice de confianza al consumidor, comentó que un factor que afectó la confianza en buena parte de esta administración Chinchilla fue darse cuenta de que el Gobierno anterior no había dejado “la mesa servida” (como lo señaló el expresidente Óscar Arias), sino que existían dificultades que la nueva administración tuvo que enfrentar.
Para fortalecer ahora la tendencia hacia una mayor confianza, Gutiérrez comentó que el Gobierno debe tener cuidado sobre cómo plantea los temas.
Por ejemplo, si el incremento en el precio del petróleo lo formula de manera pesimista, asusta a la población y esta deja de comprar, lo cual afecta la economía.
Es diferente plantearlo como un tema de responsabilidad social, lograr el mismo objetivo de ahorro en combustibles, pero sin asustar a los habitantes.
En el sector empresarial la expectativa bajó en el primer año de Gobierno de Chinchilla, aunque es un período corto para evaluarla, dijo Manuel Rodríguez, presidente de la Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Empresarial Privado.
“Un año es poco tiempo (...) Cada día que pasa sin que sepamos claramente hacia dónde vamos es un día menos para el Gobierno y para el desarrollo del país”, comentó Rodríguez.