El Tribunal Contencioso Administrativo rechazó a los abogados demandantes en el caso Crucitas una solicitud para ingresar en la propiedad de Industrias Infinito, en Cutris, San Carlos.
La gestión la presentaron con el fin de que un equipo interdisciplinario pudiera evaluar la magnitud del daño ambiental en el terreno.
Los estudios para determinar los perjuicios son necesarios, a fin de cumplir el fallo del Tribunal que anuló la concesión otorgada por el Estado a Industrias Infinito para extraer 800.000 onzas de oro.
Sin embargo, en la resolución notificada al abogado Álvaro Sagot el 21 de febrero, la jueza Lorena Montes de Oca indicó que la solicitud no demuestra los elementos de urgencia y peligro requeridos para aprobar una gestión de este tipo.
“La tala rasa que llevó a este Tribunal a resolver como lo hizo, por lamentable que resulte, no va a variar su condición, y la prueba que en forma anticipada se solicita bien puede proponerse para determinar el quantum de los daños y perjuicios”, argumentó Montes de Oca.
Álvaro Sagot criticó la decisión de la jueza y alegó que, sin una evaluación de campo, no tendrán la información necesaria par redactar la demanda de ejecución.
“Hay que establecer medidas de mitigación urgentes, pero, sin saber qué se eliminó, nos dejan en desventaja”, explicó Sagot.
Por su parte, el Ministerio de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones (Minaet) contrató a la Fundación Neotrópica para hacer una evaluación similar.
A la oficina de prensa de la Corte se le preguntó si los expertos de Neotrópica tenían autorización para ingresar en el terreno; no obstante, no respondió la consulta.