El Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) creó una nueva propuesta de ordenamiento territorial y archivó el Plan Regional Urbano de la Gran Área Metropolitana (Prugam), que se diseñó hace siete años, con fondos de cooperación de la Unión Europea.
Así lo confirmó este viernes a La Nación, la presidenta ejecutiva del INVU, Eugenia Vargas, quien detalló que el miércoles se celebró el primer consejo sectorial con el fin de establecer la política nacional de orden territorial. La actividad fue en el Instituto México (San José).
Allí se empezó a delinear el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial de la GAM (Potgam), que incluye, en una primera etapa, un taller de inducción con los municipios para conocer sus fundamentos.
En un segundo taller, el INVU prevé que las municipalidades conozcan las propuestas del Potgam y aporten sugerencias o inconformidades.
La misma institución indicó que el Prugam fue un proyecto que duró varios años y realizó estudios valiosos con una buena base.
Sin embargo, Vargas calificó al Prugam como un proyecto que “se quedó corto”. Agregó: “Está fue la razón por la que se rechazó”, dijo.
El INVU reprobó el documento final del Prugam que recibieron en el 2009 por “algunas debilidades”.
La jerarca aseguró que para el nuevo plan se tomó información del anterior. “Lo que se hizo fue una revisión exhaustiva del Prugam y las municipalidades consideraron que se tenían que discutir”.
Vargas contó que el nuevo plan se financia con ¢190 millones que otorgó el Ministerio de Vivienda.
Plan de 30 años. La ministra de Vivienda, Irene Campos, precisó que el país se rige con el plan urbanístico que se creó en 1982, (hace 29 años). “El compromiso es que para diciembre de este año esté listo el documento final de orden territorial y de vivienda”.
El plan actualmente conocido como “Anillo de contención” será el segundo intento del Gobierno por actualizar el Plan de 1982.
El Prugam se inició en setiembre del 2004 y representó además una inversión de 11 millones de euros para la Unión Europea. Sin embargo el INVU lo rechazó.
Como objetivos primordiales tenía la reorganización del tránsito, mejores vías, repoblamiento de la capital y actualizaciones de planes reguladores para los 31 cantones de la GAM.
Entre los señalamientos que se le hizo fue que eliminó el anillo de contención urbana y no planteó delimitaciones claras.
Sin embargo, lo que pretendía era realizar una redefinición de dicho anillo rescatando áreas de protección y “no se pretendió eliminarlo”, explicó el exdirector de Prugam, Eduardo Brenes.