Humanidad ya consumió el presupuesto natural del 2012

A fin de año, se habrá usado el156% de recursos que se generan en 12 meses

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En solo ocho meses, la humanidad consumió la cantidad de recursos naturales que tenía disponibles para satisfacer sus necesidades en el 2012. En otras palabras, el mundo se sobregiró en su presupuesto natural para este año.

Así lo dio a conocer Global Footprint Network, organización sin fines de lucro que aboga por integrar el concepto de límites ecológicos a los procesos de toma de decisiones de los países.

“Estamos aquí para ayudar a las naciones a sobrellevar la escasez de recursos y para cuando llegue la tormenta, estar listos”, destacó el ingeniero Mathis Wackernagel, presidente de la organización.

Según sus proyecciones, al terminar este año, la población mundial habrá consumido el 156% de los recursos naturales que el planeta puede generar en este lapso de tiempo y dado este sobregiro, se necesitarían 1,5 planetas para sostener el ritmo de consumo actual.

“El 80% de los países consumen más de su biocapacidad, entendida esta como las posibilidades de un lugar para satisfacer la demanda de recursos naturales”, dijo Wackernagel a La Nación.

Por ejemplo, si todas las personas tuvieran un consumo similar a los estadounidenses se necesitarían 4,16 planetas; 2,73, si todos fueran como los rusos; 1,95, como los brasileños; 1,18, como los chinos y 0,49, como los indios.

El caso tico. En la lista de países, Costa Rica se encuentra en la posición 69. Esto quiere decir que el consumo de cada persona es de 2,52 hectáreas globales, mientras que su biocapacidad es de 1,60; lo que da un déficit de 0,92 hectáreas globales por cada tico.

Si todas las personas en el orbe tuvieran nuestro ritmo de consumo, serían necesarios 1,42 planetas para satisfacer sus necesidades; tendencia que crece desde 1991.

“La situación de Costa Rica es de riesgo”, dijo Wackernagel y agregó: “La huella ecológica es como tener una cuenta bancaria, necesitamos saber cuánto dinero entra y cuánto sale. Si ganamos más de lo que gastamos, pues está bien pero si no es así, estaremos en bancarrota. Para un país es fundamental entender si va para la bancarrota ecológica porque se puede imprimir dinero, pero no recursos”.

¿Cómo se llegó a ese déficit? Según Wackernagel, hay tres maneras: el país puede abusar de sus propios recursos, puede importar los recursos de otros países o utilizar los recursos naturales del común global, como aquellos que están en la atmósfera o el océano.

La huella ecológica está relacionada a la forma en que se estructura la vida de una sociedad en una ciudad o país.

Por ejemplo, una casa grande no tiene el mismo requerimiento energético que una pequeña y, por tanto, la cantidad de recursos para producir electricidad es diferente aunque en ellas viva la misma cantidad de personas.

Lo mismo sucede con el transporte. El consumo de gasolina no es el mismo si la persona requiere trasladarse un kilómetro para llegar a su trabajo a si tiene que recorrer cinco o más.

“Si calculamos el déficit y lo multiplicamos por el precio de los recursos naturales, eso nos da el costo. Si vemos el costo para Costa Rica, tanto el déficit como los precios se han incrementado”, indicó Wackernagel.

¿Cómo puede ver el ciudadano promedio reflejado ese costo ecológico? “Costa Rica ya tiene dificultades para sacar a su población de la pobreza y eso a pesar de las innovaciones y programas. Simplemente, no es suficiente porque hay algo fundamental que no está resuelto: el modelo está fundamentado en recursos que ya no hay”, aseveró.

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