Atenas (AFP). Grecia evitó este miércoles la bancarrota gracias a los préstamos concedidos en los últimos días por la Unión Europea (UE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), la víspera de una nueva huelga general contra las medidas de rigor adoptadas a cambio de esa ayuda.
Diez socios de Grecia en la Eurozona le prestaron el martes 14.500 millones de euros, y la semana pasada el FMI le prestó a su vez 5.500 millones.
El objetivo de esta ayuda internacional era permitir a Grecia cumplir con una deuda de 9.000 millones que vencía este miércoles, el primero desde que la UE y el FMI acordaron un plan de ayuda de 110.000 millones de euros para el país helénico de aquí a 2012.
Antes de que se acordara el plan de ayuda, el vencimiento este miércoles de bonos griegos a diez años había desatado el temor de que Grecia cayera en bancarrota y provocara un terremoto financiero en el mundo entero.
El Ministerio griego de Finanzas dijo que el préstamo de sus socios de la Eurozona, unido al del FMI, "cubre las necesidades de financiación inmediatas a y a corto plazo" del país.
Grecia recibirá otros 18.000 millones de euros de la UE y el FMI en dos tramos en septiembre y diciembre, pero la entrega de ese monto dependerá de los resultados del plan de austeridad adoptado por el gobierno, que prevé aumentos de impuestos y recortes salariales para los funcionarios y los pensionistas.
Para este jueves, los sindicatos han convocado la cuarta huelga general del año, para protestar contra las medidas de rigor.
La huelga mantendrá cerrados ministerios, servicios públicos, escuelas y bancos. Sin embargo, los vuelos internacionales no se verán afectados, ya que los controladores aéreos decidieron no sumarse.