Gobierno acepta oír mañana a motociclistas

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El Gobierno aceptó la petición de una audiencia con los motociclistas que reclaman una rebaja en el marchamo que deben pagar este mes, aunque sin opciones reales de satisfacerlos.

Ambas partes se reunirán mañana jueves por la noche en las oficinas del Consejo de Seguridad Vial (Cosevi), informó el ministro de Comunicación, Francisco Chacón, quien advirtió de que “la situación no es fácil”.

“Hay limitaciones legales y técnicas como para resolver con facilidad el problema de este año con los marchamos de los motociclistas, pero estamos anuentes a sentarnos con ellos y oír opiniones distintas”, declaró en conferencia de prensa después del Consejo de Gobierno.

“Desde nuestra perspectiva, no vemos prácticamente ninguna salida para este año”, añadió Chacón, tras dos semanas de conflicto entre un grupo de motociclistas y autoridades del Instituto Nacional de Seguros (INS), encargado de cobrar los derechos de circulación anual.

Este marchamo aumentó un 24% en este año, pues las autoridades argumentan que influyó el costo de la atención médica de los heridos en accidentes en moto.

El grupo de motociclistas exige una rebaja y, por eso, han organizado protestas en las calles, algunas de las cuales llegaron a actos de violencia y agresión contra conductores de vehículos y buses.

Ayer no fue posible localizar a los voceros de los motociclistas para conocer si asistirán a la cita. En días pasados, rechazaron la responsabilidad en esos actos y los repudiaron de manera pública, pero las autoridades del Gobierno exigieron mayores garantías de que no habrá más bloqueos.

Con ese argumento se frustró la intención de la Defensoría de los Habitantes de sentar a la mesa a motociclistas y a autoridades en la tarde de este lunes.

En lugar de asistir a la reunión, la posición del Gobierno la manifestó la presidenta, Laura Chinchilla, en un discurso en el que llamó a la “gente buena” a censurar las protestas violentas.

Criticó a los “motociclistas que agreden a ciudadanos de bien y generan caos y temor en la población”, en alusión a los hechos del pasado martes 27 de noviembre en el peaje de Escazú y en La Uruca.