La elección de Gerardo Porras como nuevo gerente general de Bancrédito, el lunes por la noche, sorprendió porque la designación implica que el funcionario deje la dirección del Banco Popular, el tercero más grande del país (con base en el valor de sus activos), pese a que aún le restaba un año para finalizar su segundo periodo.
A partir del próximo 5 de junio, el despacho de Porras estará en la Vieja Metrópoli, desde donde buscará llevar estabilidad al más pequeño de los bancos estatales. A continuación un extracto de la conversación telefónica que sostuvo ayer con La Nación .
¿Por qué el cambio?
Uno cumple sus ciclos. Creo que prácticamente todas las metas propuestas, cuando iniciamos en el Popular, se han cumplido. Este banco en el 2011 fue el que tuvo mayores utilidades. Casi todos los proyectos están concluidos.
La salida es un año antes de finalizado su nombramiento...
Esto fue un acuerdo con la Junta (del Popular) porque voy para la competencia. La ventaja es que hay un equipo administrativo sólido. Uno requiere nuevos retos.
Pero, ¿había oposición a su continuidad?
No, no. El tema político en el Popular es interesante, pero siempre se ha podido manejar. Son circunstancias que se cruzan. Era tomar la oportunidad ahora, porque nadie lo va a esperar a uno un año.
Llega a un banco que ha perdido identidad. ¿Cuál es su propuesta?
Hay que darle una dirección más comercial al Banco porque quizás se le ha olvidado como ejercitarla. La Junta Directiva y yo coincidimos en que ha perdido la brújula y hay que apuntalarla.
Específicamente en...
En préstamos. Es un banco que tiene camino recorrido en pymes.
Pero, perdieron (la administración de) Banca de Desarrollo.
Sí, sí, pero era la administración de un fondo. No necesariamente son los préstamos. Es un banco que puede aportar mucho y se retomará. Hay mucho espacio para crecer. Una vez que me incorpore, definiremos estrategias para ver dónde está la gran oportunidad.
El Banco perdió peso en los últimos años, ¿cómo revertirlo?
Aquí, el tema es crecimiento de la cartera de crédito y los activos. Con la pérdida del paquete de Banca de Desarrollo hay un ingreso que no está entrando. Aquí, no hay otra forma más que determinar los puntos donde se falla y trabajarlos. Hay que ganar participación de mercado. Buscar más clientes, más préstamos y captar más. Esa es la clave: convertir a Bancrédito en un banco muy competitivo y muy rentable.
¿Y en qué plazo?
Bueno, vamos a comenzar. Le doy una referencia, estoy cumpliendo prácticamente nueve años de estar en el Banco Popular. Si se ve para atrás el cambio fue grande. Se requiere tiempo y adaptación.
¿Podrá competir contra el Banco de Costa Rica, el Nacional y el mismo Popular?
Ahí está el secreto. Confío que los bancos del Estado podamos, como se ha hecho en el pasado, llegar a entendimientos comerciales que beneficien a la población.
En los últimos años hubo vaivenes en la gerencia de Bancrédito. ¿Eso queda atrás?
Lo que pasó, bueno o malo, ya es un tema del pasado. Cada persona que ha llegado, ha intentado aportar. Ahora la Junta Directiva cree que mis 35 años de experiencia serán un aporte.
¿Qué hará para mejorar la relación con los trabajadores?
Hablar con mucha transparencia sobre los proyectos. Escuchar a los trabajadores será muy importante para saber cómo mejorar. Quien estuvo durante el temblor, adentro, sabe lo que pasó.