¿Es el amor bueno para la salud?

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Todos conocemos la receta para tener buena salud física y mental: mantener una dieta sana, realizar ejercicio y mantener los niveles de estrés bajo control' pero, ¿dentro de esa receta es necesario incluir una relación estable en pareja?

David y John Gallacher, dos médicos británicos, se dieron a la tarea de averiguar justo eso y, para ello, hicieron una revisión de decenas de estudios que evalúan el impacto del matrimonio o la vida en pareja en la salud.

Enamorarse tiene su costo; lo lleva a uno por un tumultuoso camino de liberación de dopamina seguido por una dosis de oxitocina –la hormona que lo lleva a uno a unirse más a la pareja—' en su momento, todos estos sentimientos y cambios hormonales traen felicidad y bienestar a la persona, pero, si la relación no funciona, el torbellino de sentimientos negativos que trae ello puede, más bien, perjudicar la salud.

Entonces, ¿vale la pena ir en busca de la media naranja? Según los Gallacher, la respuesta es sí. Los datos lo demuestran: un estudio realizado en siete países europeos halló que quienes viven en relaciones exclusivas y estables a lo largo de mucho tiempo son más longevos; viven, en promedio, entre 10% y 15% más.

Según el análisis, publicado en el British Medical Journal , los hombres casados logran mejorar su salud física, probablemente por el efecto positivo en el estilo de vida que trae para ellos la vida en pareja; mientras que las mujeres obtienen una mejor salud mental al tener la seguridad de una relación estable.

Claro, como bien sabemos, la sabiduría popular suele estar casi siempre en lo correcto y, cuando señala que más vale estar solo que mal acompañado, cumple con ello. Las relaciones complicadas tienen un impacto negativo en la salud. Los solteros tienen mejor salud que aquellos inmiscuidos en una relación difícil y, aunque una separación trae consigo su montaña rusa de sentimientos, a la larga la salud mental de aquellos que estaban en una mala relación mejora si se le pone fin a ella.

Tras su análisis, los médicos incluso llegan a recomendar la mejor edad para iniciar una relación que traiga consigo beneficios para la salud. Señalan que, para el hombre, dicha relación debe establecerse después de los 25 años de edad, mientras que para la mujer, lo ideal es consolidarla entre los 19 y 25 años.

El análisis le da un voto de confianza al amor y las relaciones exclusivas y duraderas. Así que ya lo sabe, por su salud, si ya tiene a su “media naranja”, cuídela y, si no, vale la pena seguirla buscando.