Empresario nacional afirma que desarrolló plaguicida natural para combatir la roya

Desarrollador se queja por supuesto atraso en trámites de registro de fungicida

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Un fungicida natural, desarrollado completamente a base de plantas para combatir la roya, está listo, según el empresario Meir Ary, dueño de la compañía Bioloko Natural.

Sin embargo, el producto botánico enfrenta problemas para su registro en el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), adscrito al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG). Esto imposibilita su comercialización en un momento cuando el país lo requiere con urgencia, comentó el empresario.

Un fuerte ataque del hongo de la roya afecta a los cafetaleros desde los últimos meses del año pasado. Las cifras oficiales indican que atacó a 60.441 hectáreas de las 93.774 que tiene el país sembradas.

Esaú Miranda, del departamento de agroquímicos y equipos, en la Unidad de Registro de Agroquímicos del SFE, dijo que la solicitud del fungicida llamado Kokolongo efectivamente está en trámite.

Explicó que hace algunos días el registro se había solicitado para su utilización contra el ojo de gallo, otro de los hongos que afecta a las plantaciones del café nacionales.

Hace un poco más de una semana, agregó Miranda, se amplió la solicitud de registro para combatir el hongo de la roya.

Requisitos. En ambos casos se debe seguir los reglamentos vigentes, advirtió Miranda. La documentación y análisis de registro pasa por tres ministerios: Salud, Ambiente y Energía (Minae) y el MAG.

La documentación ya está en análisis de esos tres ministerios. Pero Salud y Minae no tienen plazo para analizar tanto los documentos como las pruebas y los ensayos de campo. Miranda explicó que una resolución de la Sala IV dejó sin plazos estos trámites.

Agregó que también se debe ser muy cuidadoso en las pruebas de toxicidad, aunque se trate de un producto botánico, pues siempre tendrá composición química. En este caso, detalló, se trata de un producto desarrollado a base de la planta con el nombre popular Lotería, la cual produce alergias a algunas personas al tener contacto.

“No puedo emitir criterio, porque está en análisis: cada ministerio responderá por lo que corresponda”, argumentó Miranda.

Ary, en tanto, comentó que ya hizo las pruebas de ojo de gallo con especialistas de la Universidad de Costa Rica (UCR), así como las de roya con funcionarios del Instituto Nacional de Investigación y Transferencia en Tecnología Agropecuaria (INTA). Espera que esto le ayude en la inscripción.