Nació 1777Murió 1825Nacionalidad: rusa
Primogénito y sucesor del zar Pablo Pavlovich I, Alejandro fue educado por el filósofo suizo La Harpe, quien le inculcó desde niño los principios de libertad y civilización. Pero fue un monarca inconstante, que mostró signos claros de esquizofrenia, y su política desde el trono estuvo llena de vacilaciones y aparentes contradicciones. En el ámbito externo logró la anexión de Georgia y Finlandia a Rusia en 1809, y estrechó el cerco sobre Polonia. Internamente, fundó escuelas y universidades, fomentó el comercio, abolió la tortura, los tribunales secretos y la transferencia por venta o donación de los campesinos, y reconcilió la Iglesia con el pueblo. No obstante, en sus últimos años, parece que por la influencia de dos consejeros muy conservadores, tomó medidas realmente reaccionarias.
Al ser asesinado su padre en 1801, ascendió al trono; impuso entonces un gobierno más liberal, fundamentándose en los principios de la Ilustración. En referencia a su reinado, que coincide con el tormentoso período napoleónico, su biógrafo consigna: "Aunque arrastrado inevitablemente a la guerra contra Francia, Alejandro era un ferviente admirador de Napoleón, cuyo genio le cautivaba."
En 1805, coaligado con Austria, tomó parte en la famosa batalla de Austerlitz, en la que austríacos y rusos fueron derrotados por Bonaparte. Se retiró entonces del campo militar y en 1806 concertó una alianza con Prusia. A raíz de los combates en Eylau y Friedland, en los que Napoleón obtuvo la victoria, firmó con este la Paz de Tisit, en cuyo cumplimiento aceptó el bloqueo continental que alteró totalmente la política exterior tradicional de Rusia.
La alianza de Alejandro con Napoleón no duró mucho tiempo, y tuvo por resultado que el zar adoptase una actitud más conservadora, identificando los principios de la Revolución Francesa con la agresión de Napoleón. Durante la invasión de Rusia por las tropas francesas en 1812, aunque Alejandro no participó personalmente en las batallas libradas en su propio suelo y permaneció en San Petersburgo, sí tomó parte activa en las grandes batallas sostenidas en el oeste de Europa en 1813 y 1814, a medida que los aliados avanzaban sobre París.
Figura descollante en el juego político y diplomático que siguió a la derrota de Bonaparte, inspiró, bajo la influencia de la baronesa Juliana de Krüdener, la creación de la llamada Santa Alianza, por medio de la cual, de su lucha contra los movimientos liberales pretendió hacer una especie de cruzada religiosa, equiparando el absolutismo con el cristianismo y el liberalismo con el ateísmo.
Sujeto a periodos de misticismo religioso, Alejandro murió misteriosamente en Taganrog. Como no tenía hijos, le sucedió en el trono su hermano Nicolás I. Hubo persistentes rumores en Rusia según los cuales el zar no había muerto, sino que había huido a Siberia y se había convertido en ermitaño bajo el nombre de Feodor Kusmichy, quien vivió hasta 1864. Para calmar tales habladurías, las autoridades rusas acordaron abrir el féretro de Alejandro en 1865 y, para sorpresa de todos, lo encontraron vacío.