San José (Redacción). Dos templos ubicados en el cantón de Nicoya, declarados patrimonio histórico y arquitectónico de Costa Rica, sufrieron daños luego del sismo que sacudió el país hoy a las 8:42 a.m.
Según un informe preeliminar del Centro de Patrimonio del Ministerio de Cultura las edificaciones más afectadas son la iglesia de San Blas de Nicoya y la Ermita de Quebrada Honda.
El templo de San Blas –de estilo arquitectónico colonial– sufrió desprendimientos en sus repellos.
El director a.i. del Centro de Patrimonio, Adrián Vindas, viajará a Nicoya el viernes para realizar una inspección exhaustiva del estado del edificio.
“Este proyecto cuenta con presupuesto para una restauración, que estaba prevista para los próximos días, por lo que podemos pensar en la posibilidad de ampliar el contrato para su reparación”, declaró Vindas.
El primer templo colonial de Nicoya se levantó ahí mismo en 1644 y pertenecía a la orden franciscana.
La iglesia fue destruida y reconstruida varias veces debido a eventos sísmicos sucesivos, hasta que finalmente en el siglo XIX se construyó el edificio actual.
Con respecto Ermita de Quebrada Honda también se observan desprendimientos, especialmente en la fachada principal.
“Esperamos que sea solamente repellos lo que se vino al suelo y no tengamos que recurrir a reforzamientos estructurales. Según me han comentado los evaluadores, hasta el momento se registran daños que son fácilmente reparables”, afirmó Vindas.
Dicho edificio fue construido en 1911 y es un ejemplo de la arquitectura en bajareque.
El funcionario informó que el templo parroquial de Naranjo en Alajuela se reporta con daños en los pisos, por lo tanto se hará una inspección, a cargo del ingeniero Miguel Cruz.
“A esta edificación hace poco se le hizo un refuerzo estructural”, agregó Vindas.