La diputada Carmen Muñoz, del Partido Acción Ciudadana (PAC), le ganó el pulso al legislador evangélico Justo Orozco, de Renovación Costarricense, para seguir en la discusión del plan de Ley de Sociedades de Convivencia.
El recurso de recusación que Orozco presentó ante la Comisión de Asuntos Jurídicos no prosperó, pues fue rechazado por el presidente de ese foro, Luis Gerardo Villanueva.
La intención de Orozco era alejar a Muñoz de la discusión sobre las uniones homosexuales en la Comisión de Jurídicos.
Según el criterio de Villanueva, una recusación no cabe contra un diputado porque, primero, el derecho parlamentario no lo contempla y, segundo, porque la idea es que un legislador, al votar, tome posición a favor o en contra de las iniciativas de ley.
La resolución del presidente de Jurídicos establece que, en adelante, los actos que podrían ser discriminatorios contra los diputados, debido a sus preferencias religiosas, culturales o sexuales, no tendrán cabida y deberán ser rechazados de plano.
El proyecto no puede avanzar significativamente en la Comisión, ya que en su camino tiene cientos de mociones presentadas por el diputado Carlos Avendaño, también de un partido evangélico, Restauración Nacional, y otras tantas de Orozco.
Los miembros de la Comisión de Jurídicos apoyaron el criterio de Villanueva y felicitaron a Muñoz por la resolución en su favor.
El liberacionista Fabio Molina coincidió con José María Villalta, del Frente Amplio, en que la intención de Orozco es una ofensa a los derechos humanos y una “incitación al odio”.
Para Luis Fishman, los pasos que el legislador evangélico dio en contra de la diputada Muñoz fueron calculados en busca de rédito electoral. “Cada religión tiene sus creencias, y hay que defenderlas, pero sin discriminación”, indicó.
Muñoz afirmó que espera que el diputado evangélico modere su tono respecto a las uniones gais, luego de la resolución tomada por Villanueva.
Orozco, en cambio, indicó que leerá los argumentos en contra de su recurso de recusación, a fin de analizar si aún tiene la posibilidad de llevar el tema más allá de la Asamblea Legislativa.
“Lo han confundido con discriminación, pero ella es mi prójimo, a quien debo apoyar en lo que sea, coincidimos en muchas cosas”, dijo Justo Orozco.
El diputado Orozco reconoció que solo hizo la solicitud para atrasar el proyecto. “Sería un fariseo si ando buscando el mal de mi prójimo”, adujo.
“A él se le acaba el tema acá. Me doy por satisfecha con la resolución”, dijo Muñoz, quien confía en que el congresista evangélico no insista en atacarla.