Dinero para urgente renovación de cafetales permanece engavetado

Dificultades para conseguir un operador financiero frena uso de recursos

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Los ¢6.000 millones aprobados por el Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD) desde la primera semana de marzo pasado para la urgente renovación de cafetales siguen engavetados.

Los recursos no se pueden usar por dificultades para conseguir un operador financiero que los administre. Los bancos, cooperativas y otros entes autorizados estiman que no es rentable por la poca ganancia que deja el programa.

Los cafetaleros, en tanto, afirman que de subirse el margen que ganan los operadores financieros la tasa de interés final de los créditos será demasiado alta.

En tanto, la renovación de un 40% de los cafetales del país es una urgente necesidad pues ya tienen más de 25 años en producción y su vida útil se estima en 20 años.

El Instituto del Café de Costa Rica (Icafe) atribuye a esta vejez de las plantaciones una caída de la producción desde los 2,92 millones de fanegas en fruta (igual cantidad de sacos de 46 kilos de grano beneficiado) en el período 2002-2003 hasta 1,92 millones de fanegas en el año cafetalero 2009-2010.

Los recursos del SBD servirán para renovar apenas las primeras 2.000 hectáreas de un total de 30.000 hectáreas que se contemplan en el programa de renovación.

Sin embargo, el Icafe, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y los productores consideraban que ese banderazo de salida para el programa era fundamental para obtener financiamiento en otras fuentes nacionales, como los bancos, o internacionales.

Dos extremos. Geovanny Castillo, director ejecutivo de la secretaría técnica del Consejo Rector del SBD, dijo que el problema planteado es poder prestar a una tasa de interés baja.

Ese objetivo beneficia a los pequeños productores, que en muchos sectores son la gran mayoría. En el caso de los cafetaleros, un 92% de los 52.000 productores son considerados pequeños.

“El tema de fondo es que la actividad productiva requiere condiciones de financiamiento apropiadas, con tasas de interés relativamente bajas, y ello involucra un margen de intermediación que muchas veces no es atractivo para operadores financieros”, dijo Castillo.

Los operadores financieros no asumen la administración de fondos del SBD porque no es rentable dado el poco margen de intermediación que tienen.

Xinia Chaves, viceministra de Agricultura, reconoció que ese tema exige una modificación de la ley del SBD. Dijo que, en coordinación con los sectores involucrados, trabajará en una reforma integral de ese sistema, que vaya más allá del financiamiento.