Si existen ciudadanos a los que les importó poco la última elección de alcaldes, son los habitantes de la Gran Área Metropolitana (GAM).
Los mayores niveles de abstencionismo de la pasada votación municipal, realizada el 5 de diciembre, se registraron en los cantones más poblados de la GAM.
Así se comportó el área urbana asentada en el Valle Central, en la cual habita más de la mitad de la población del país.
En 14 populosos municipios de esa región, los porcentajes de personas que no se interesó en elegir a su alcalde superaron el 75% y se acercaron al 85%, mientras que el promedio nacional fue del 72%.
Esos 14 cantones concentran el 70% de la población de la GAM. En ellos, viven 1,9 millones de un total de 2,6 millones de personas.
Por ejemplo, en Desamparados (el segundo cantón más habitado del país), solo votaron 16 de cada 100 electores.
Además de ese cantón, entre los de mayor abstencionismo están el Central de San José, Goicoechea, Alajuelita, Tibás, Alajuela, Cartago, La Unión y Heredia.
En dicho grupo, sobresalen las cuatro cabeceras de provincia del Valle Central, a las que se sumó el cantón Central de Limón en ese apartado.
Casi todos los cantones con más de 100.000 habitantes tuvieron un altísimo abstencionismo (11 en total). Las excepciones fueron Pérez Zeledón, San Carlos y el Central de Puntarenas, pero en estos el porcentaje también superó el 60%.
Dentro de la GAM, otros 17 cantones con una menor población registraron abstencionismo entre el 50% y el 75%. Entre ellos, están Escazú, Santa Ana, Paraíso y la mayoría de los que rodean al cantón Central de Heredia.
En tanto, fuera de la GAM, el fenómeno del altísimo abstencionismo se extendió solo al Central de Limón, Pococí y Corredores.
Pueblo pequeño... Del otro lado de la moneda, la alta participación electoral para designar alcaldes fue un fenómeno de solo nueve cantones, todos con menos de 20.000 habitantes.
En total, en ellos viven unas 100.000 personas.
Se trata de municipios en los que votó más del 50% de la ciudadanía.
Tal es el caso de lugares como Hojancha, San Mateo, Parrita, Abangares, Turrubares, León Cortés y Zarcero.
En Hojancha votó casi el 71% de sus 6.500 habitantes.
En tanto, en otros 55 cantones el abstencionismo se mantuvo entre el 50% y el 75%.
En los comicios nacionales para elegir presidente, diputados y regidores, el comportamiento del electorado fue totalmente inverso. En la GAM el abstencionismo fue menor que en el resto del país.
Juan Marín, ministro de Descentralización, estimó que el desinterés por elegir a las autoridades locales fue mayor en la GAM porque sus habitantes están más cerca del Gobierno Central y de instituciones como el IMAS o el MEP.
En las zonas rurales, continuó Marín, la gente se siente más lejos del Gobierno y busca respuestas en la municipalidad que, a su vez, muchas veces sirve de enlace con el Poder Ejecutivo.
Sin cultura de ciudad. Eduardo Brenes, exdirector del Plan Regional Urbano de la GAM (Prugam) considera que el desinterés de los ciudadanos de la GAM obedece a que los habitantes aún tienen “el ombligo en el campo”.
“No hay una cultura urbana para que la gente entienda que vivimos en ciudades y hay que cuidarlas. ¿Cuánta gente se preocupa de que las aceras estén bien? Los regidores y alcaldes no ven que gobernar el municipio es gobernar la ciudad; hay miopía, desinterés, piensan en otras cosas”, dijo Brenes.