Danza Universitaria provoca a la memoria

Los recuerdos y el implacable paso del tiempo subirán a escena en la obra Casa rodante, un espectáculo de la coreógrafa Gloriana Retana, que busca mover las emociones del público con baile, sonidos y aromas. Las funciones comienzan hoy

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Un espectáculo intimista, que provoca los recuerdos del espectador. Así es la obra Casa rodante, primera coreografía que la compañía Danza Universitaria estrena este año.

El espectáculo es una creación de una de las bailarinas y coreógrafas de la agrupación: Gloriana Retana. Esta obra estará en cartelera durante dos fines de semana en el Teatro Montes de Oca, en San Pedro.

En Casa rodante, la creadora juega con el tema del tiempo y, a partir de las imágenes que los bailarines recrean con sus cuerpos, permite que el espectador haga una introspección y se traslade a momentos de su vida.

La obra dura unos 50 minutos, en los que el público verá solos y coreografías grupales que demandan un gran esfuerzo físico.

Además del baile, la obra utiliza otros recursos tecnológicos y sensoriales (aromas y sonidos), que involucran directamente al público en la evolución de la obra.

Por ejemplo, antes de tomar sus asientos, las personas deben atravesar diferentes espacios del teatro, los cuales simulan una casa.

De esta manera, el público pasa por una cocina, un pequeño jardín y una lavandería, donde el aroma del café, la tierra mojada y la ropa recién lavada hacen inevitable la asociación con un pasaje de la vida de cualquier persona.

Cuando se está dentro del auditorio, la experiencia sigue, porque los asistentes no se sientan en las butacas del teatro, sino en graderías que rodean el escenario. Esta ubicación permite apreciar de cerca el movimiento del grupo e, incluso, notar la intensidad del elenco al respirar.

Adicionalmente, parte de la banda sonora combina ruidos de ciudad, motores, voces infantiles y el sonido de una caja de música.

Casa rodante no tiene una historia qué contar. La obra refleja la forma de actuar de la mente porque los recuerdos no vienen cronológicamente. No es un espectáculo en el cual me inclino por la añoranza, sino por sentir el vivir en el presente, por eso quiero mover las sensaciones del público”, dijo Retana.

Para ella, la oportunidad de volver a crear una obra para Danza Universitaria (esta es la tercera pieza que hace para el grupo) llega en un buen momento, pues recientemente ganó el Premio Nacional de Danza al mejor grupo del 2009, junto a Los que Somos.

“Este es un momento de madurez. Tengo muchas ganas de experimentar, de aventurarme y es un impulso que debo aprovechar porque ideas para hacer obras abundan, pero no siempre el deseo de arriesgarse”, concluyó.