Una relación más cercana con el público, en la que se puedan apreciar los detalles y la pasión de las intérpretes, es el eje que movió a Vitral Danza a lanzar el espectáculo Una mirada diferente .
“Esta temporada es de repertorio. No son estrenos, sino coreografías que se han bailado en otras oportunidades”, explicó Henriette Borbón, ganadora del premio nacional a mejor obra coreográfica del 2012.
El espectáculo dura una hora y consta de tres coreografías. Soneto 90 en interpretado por Borbón y tiene música en vivo y original de Isabel Guzmán, también bailarina de Vitral Danza.
La pieza está basada en la obra del escritor William Shakespeare y trata sobre una mujer que le pide a su pareja que, si la va a dejar, lo haga de una vez para no alargar el sufrimiento.
La siguiente coreografía es TOC, acerca de los trastornos obsesivo compulsivos. Es ejecutada por Natalia Herra, galardonada con el premio nacional a mejor intérprete 2012.
La función cierra con Media luz , trabajo acerca de la constante búsqueda de la esencia del ser humano.
“Mi iniciativa es que el público pueda percibir detalles que en otros escenarios no se perciben porque la distancia entre el público y el escenario es muy grande”, dijo Borbón.
Vitral Danza es un grupo independiente que se formó el año pasado y que consta de cinco bailarinas. En noviembre presentarán su nueva coreografía Grida , que significa “gritos” en italiano. La obra trata sobre las personas que denunciaron ser abusos y cuyas voces no fueron escuchadas.