Crítica de televisión: Vos & Yo : El costo de diferenciarse

Vanguardista El nuevo programa rompe reglas básicas de la TV

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Así como canal 9 ha hecho programas buenos, ha hecho programas que quedan debiendo. El nuevo talk show Vos & Yo , en definitiva, es uno de los que no solo queda debiendo, sino que parece no encontrar su punto de acomodo.

Un factor que contextualiza la producción hecha por canal 9 es el mosaico de propuestas y niveles de producción de su parrilla.

Esta misma característica, que muchas veces es valor para la audiencia, parece haber pasado factura en el estreno de Vos & Yo , en el regreso a la TV de Silvia Blanco. Se pasa los jueves y domingos, 9 p. m.

Lo primero es anotar que la creatividad existe, lo trasgresor existe, lo vanguardista también.

Es deseable querer innovar, descubrir nuevas maneras de hacer la televisión. Sin embargo, para poder trasgredir las normas de cualquier ejercicio artístico, es importante comprender esas normas antes de romperlas y lograr innovar.

Un estreno de un programa es la oportunidad para establecer la oferta para el público de ese día en adelante.

Claro que cada programa evoluciona y puede tardar en acomodarse, pero el primer día marca. La mayor marca que dejó el programa Vos & Yo , sin duda, fue el trabajo de cámara que, claramente, busca una estética propia; sin embargo, el resultado es tan atípico y antiestético que atenta contra la comunicación del espacio con su audiencia.

Extraño. Tal vez usted pudo ver el programa y lo notó “raro”. La razón es que el juego de cámara era tan transgresor que no toma en cuenta lo establecido en la academia audiovisual –porque sí, hay reglas en la televisión que deberían seguirse–.

Lo común en estos programas es un trabajo de cámara que sin ser sencillo, muestra la conversación entre invitados; es una situación ya estudiada de manejo habitual en el manual del lenguaje audiovisual desde hace más de 60 años.

Un ejercicio básico es el duelo, el pase de entrevistador a invitado de manera constante, que guía la conversación, la hace comprensible. Este flujo puede romperse en ocasiones con imágenes del set, el público y detalles para variar.

Vos & Yo presenta una realización que niega todo aquello y plantea esquemas inéditos de realización, mostrando planos enclaustrados, espacios vacíos y cabezas cortadas que parecen flotar en la nada.

Creo que la atención de la audiencia es más fácil de perder cuando la realización es confusa y sin dirección. El movimiento de la cámara debe llevarnos a la verdad, al argumento. En Vos & Yo la cámara divaga y complica la comprensión de la agenda. Es difícil para usted, como audiencia, digerir un tema si no está bien contado; la manera en la que se cuenta un programa es mediante el trabajo de cámara.

Creo que el intento es introducir el concepto de cámara subjetiva como estandarte.

Si usted alguna vez ha visto la grabación casera de un cumpleaños entenderá qué es cámara subjetiva: la visión “protagonista presencial” que trata de emular la presencia de la audiencia in situ.

Un ejemplo de este concepto en el cine es la película Cloverfleld (Reeves, 2008). En la TV se usa en reality shows ; el problema es que un talk show no obtiene beneficio de esa técnica, ya que no hay una situación que emular.

Puede que el afán de realizar Vos & Yo con esta técnica sea contraproducente, para lo que al final es un producto de comunicación y no arte.

Temas prohibidos. Sobre la agenda, Vos & Yo es un programa que busca hablar de lo que no se habla en público; parece una oferta de temas “privados”, por ejemplo el jueves hablaron sobre infidelidad por Internet.

Uno de los desaciertos en el manejo de la información es que no se retoma el tema luego de la pausa; esto siempre es un servicio para el público que recién se suma al programa, al igual que el nombre del invitado que lamentablemente solo se presentó al inicio.

El público requiere estos mensajes para conectar constantemente con el tema que se desarrolla. Si usted llegó tarde este jueves, probablemente aún no sepa quién era el invitado ni a qué se dedicaba.

En el espacio, como es consigna en el 9, se da participación al público constantemente; esto se agradece. Preguntas y materiales pregrabados están a disposición para presentar al público; sin embargo, los comentarios de Facebook tenían un mes de haber sido registrados, esto no calza con la interactividad que promete canal 9.

Si bien el programa es inactual temáticamente, le resta formalismo, podrían tratarlo al aire de manera más inmediata.

No dudo que cuando la realización supere el momento de acomodo, el programa pueda consumirse de manera amena por la audiencia. Si usted no lo observó podría darle una oportunidad este fin de semana, verlo y juzgarlo, y valorar este tipo de realización según, su percepción.