Costa Rica fue protagonista en la Expo Shanghái 2010

País promovió industria, arte y la visitación a sus parques nacionales

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Costa Rica fue ayer la gran protagonista de la Expo Shanghái 2010, la feria internacional más grande del mundo que se realiza en China.

A ritmo de tambito, con el aroma del café recién chorreado y con un pabellón inundado de un color verde naturaleza, la delegación nacional lució sus mejores galas para promover nuestra industria (incluida la aeroespacial), arte y parques nacionales.

Por el puesto tico desfilaron, durante la jornada, miles de curiosos de diferentes países. Ellos fueron atendidos con fotografías de la biodiversidad tica, desplegables informativos y hasta algún “pura vida” que no siempre entendieron.

Algunos de los anfitriones fueron el astronauta costarricense Franklin Chang Díaz, así como el escultor Jorge Jiménez Deredia, quien mostró una de sus obras maestras.

Por la noche, se realizó la llamada ceremonia del Día de Costa Rica. En ella, los organizadores de la feria destacaron que el puesto tico fue uno de los más gustados: unos 8.000 visitantes cada día.

La Expo Shanghái 2010 cuenta con la participación de 192 países de los cinco continentes.

En este acto protocolario participaron los ministros Anabelle González (Comercio Exterior), Francisco Jiménez (Obras Públicas y Transportes) y Manuel Obregón (Cultura y Juventud) , así como el canciller de la República, René Castro.

En su discurso, Castro alabó la relación de Costa Rica con China, agradeció su generosidad económica con el país y delineó algunos retos como la necesidad de “esforzarnos más” por promover la industria tecnológica.

Además, Castro señaló la urgencia de que el costarricense sea más atrevido y soñador.

“Necesitamos una Costa Rica de más soñadores dispuestos a ir más lejos, como lo hizo nuestro querido astronauta costarricense de origen chino, Franklin Chang.

“Él traspasó los límites de nuestro espacio terrestre y hoy se atreve a soñar aún más lejos con sus proyectos e invenciones de un motor de propulsión de plasma, que será de beneficio para toda la humanidad”, aseveró el Canciller.

El cierre de homenaje a Costa Rica estuvo literalmente en manos del pianista y actual ministro de Cultura, Manuel Obregón.

Con obras de sus discos Simbiosis y Piano Malango y el soporte musical del percusionista Carlos Tapado Vargas, Obregón mostró su talento a los orientales.

El músico compartió escenario con el Grupo de Ballet Folclórico Mi Linda Costa Rica.