Concierto tuvo tibio arranque

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Aunque el Concierto por la Democracia auguraba una gran cantidad de público que se daría cita para ver a grandes músicos, nacionales y extranjeros sobre un mismo escenario, la realidad es que la actividad se caracterizó por su escasa asistencia, por lo menos en las horas previas al desfile de artistas.

A eso de las 5 p. m., cuando un equipo de Viva llegó a la zona de concierto –misma que se utilizó para la ceremonia matutina del traspaso de poderes–, esta lució casi desolada. Solo pequeños grupos de personas estaban sentados frente a una gigantesca tarima, al tiempo que grupos como Gandhi y Éditus realizaban sus respectivas pruebas de sonido.

Gente joven, algunos con un poco más de años y muy pocos niños quisieron disfrutar de esta actividad gratuita, que se celebró en el Parque Metropolitano de La Sabana.

Rónald Núñez, quien llegó como a las 5 p. m., comentó que quiso estar en el concierto con la intención de conocer a los artistas que se presentarían. No era el único. “Vine a pasear un rato para ver como está el ambiente”, dijo Lorena Arias, quien esperaba pacientemente.

No obstante, otros de los asistentes al concierto sí tenían claro a cuáles músicos querían ver. Tal fue el caso de los jóvenes Josué Molina y María Fernanda Ruiz, de San José.

Ambos querían ver a los nacionales de Gandhi y Malpaís.

Sin duda, la espera para ver a sus artistas favoritos fue tranquila. Sentados en el zacate o sobre una superficie de hule que protegía gran parte del suelo alrededor de la tarima, los asistentes se tomaron el tiempo para conversar, comer o tomarse algún refresco.

Vale destacar que no se vio gente consumiendo licor o muchos vendedores de pollo, papas fritas, gorros, bufandas o cuanto artículo para consumo se vende comúnmente en estos eventos masivos.

Un cielo despejado y una noche que sumaba frescura con el pasar de los minutos, añadió un buen ambiente al lugar.

Algunos de los toldos colocados alrededor de la tarima fueron ocupados por quienes querían evitar estar a la intemperie. Incluso, muchos de los vecinos de La Sabana escogieron los balcones y terrazas de sus hogares para ver cómodamente la actividad.

A eso de las 6:50 p. m., el concierto arrancó; eso sí, con una notable mayor cantidad de público.