La Comisión para Promover la Competencia (Coprocom) adversó la forma como el Instituto del Café de Costa Rica (Icafe) otorga un sello a la industria para distinguir el producto 100% nacional.
El fallo, que no es de acatamiento obligatorio, cuestiona que el Icafe entregue el sello a cada industria y solicita que lo haga por marcas.
La resolución es una respuesta a una consulta presentada por la Cámara de Tostadores de Café, gremio que está en un enfrentamiento con el Instituto por las existencias del grano costarricense.
Este sector afirma que desde el 2004 se ha venido presentando una escasez de oferta de materia prima nacional, lo cual obligó a importar de Centroamérica.
La situación se agudizó en los primeros meses de este año, según dijo el vicepresidente de la Cámara de Tostadores, Miguel Sánchez.
El Instituto del Café de Costa Rica (Icafe) niega el desabastecimiento pues dice que destina un 11% de la cosecha a consumo interno.
Razones. Ana Victoria Velásquez, directora de la Coprocom, explicó que el sello para la industria puede limitar a las compañías.
Detalló que, por ejemplo, una industria puede tener cinco marcas de café, de las cuales solo una contiene grano importado. Aunque las otras cuatro utilicen materia prima 100% nacional, en este momento no pueden vender con el sello pues la industria no califica.
La Comisión resolvió una consulta que cuestionó el reglamento emitido por el Icafe el 23 de octubre del 2009, que regula el distintivo.
Ese reglamento establece que el sello “es un reconocimiento para todos aquellos tostadores que ofrecen café 100% de origen costarricense”. Para esto exige requisitos.
Ronald Peters, director ejecutivo del Instituto, recordó que la entidad tiene potestad en la ley para defender al productor nacional.
Agregó que hasta la tarde de ayer no tenían notificación oficial del fallo de la Comisión, que se dio en la sesión del pasado 27 de abril.
El Icafe, agregó, se prepara para realizar una revisión legal del fallo y a partir de eso determinar si es necesario otorgar el sello a marcas y no a las firmas tostadoras.
La Coprocom también ordenó a su Unidad Técnica de Apoyo que realice una investigación para determinar si la acción del Icafe se puede considerar como una práctica monopolística.
Velásquez comentó que el objetivo es permitir al consumidor tener varias opciones para escoger.