Ciencia mejora ganadería

Sistema aprovecha calidad de vacas

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Nuevos adelantos científicos que mejoran notablemente el implante de embriones en bovinos son aprovechados en Costa Rica para contar con ejemplares de alto valor genético, con alta productividad en carne y leche y con características idóneas para adaptarse a las condiciones del trópico.

El sistema general es el ya conocido -el implante de embriones se practica en Costa Rica desde hace algunos años- que aprovecha embriones obtenidos en vacas madres en países de alto desarrollo en ganadería, en especial Estados Unidos, los cuales se implantan en vacas receptoras para obtener animales de alta calidad.

Pero en este caso el gran avance científico consiste en que no es necesario efectuar tres pasos que exigían mucho cuidado para descongelar los embriones al momento del implante, sino que se puede efectuar directamente, explicaron los médicos veterinarios Adrián Cartín y Charlie Lacey, de la firma importadora de los embriones desde Tejas, Estados Unidos, y Alfredo López, egresado de la Escuela Centroamericana de Ganadería (ECAG).

Esto se ha logrado al cambiar la sustancia crioprotectora en la cual se colocan los embriones para luego congelarlos.

Anteriormente, al descongelarlos para llevar a cabo el implante existía el peligro de que se afectara la estructura de las células y de que incluso se contaminaran con material tóxico. La nueva sustancia permite el implante directo, eliminando el riesgo sobre las células y la contaminación tóxica.

Así se empieza

Cartín explicó que el proceso se inicia cuando se estimula, con el uso de hormonas, a una vaca madre -escogida por sus buenas características y alta calidad genética- a desarrollar una superovulación.

Luego se le practica a esta vaca la inseminación artificial, de tal manera que se pueden obtener hasta 35 embriones de ella y no generalmente uno o dos máximo como se da en las condiciones de reproducción natural.

Ese punto es uno de los más relevantes en el sistema de implante de embriones pues lleva a aprovechar la calidad genética de la madre -al extraerle varios embriones- y no solo la del macho como sucede en la inseminación artificial.

Al inducir una vaca a la superovulación, se conservan sus mejores condiciones, y si a esto se añade el material genético de toros de alta calidad al hacer la inseminación, el resultado son animales de las máximas calidades posibles, explicaron los especialistas.

Los embriones extraídos siete días después de inseminada la madre se pueden transferir directamente a una vaca receptora -puede ser de cualquier otra raza- o congelarse para venderse, para exportación o para conseguir, en algún momento, vacas receptoras en la propia finca.

En Costa Rica se ha comenzado a importar embriones de razas puras, obtenidos en Estados Unidos. Uno de los casos es el que ofrece animales de la raza Simmental importados desde el estado de Tejas, cuyas excelentes características en el doble propósito -producción de leche y luego destace para carne- la hacen tener un futuro prometedor.

La firma importadora de embriones desde Tejas donó cuatro para mejorar genéticamente el hato de la ECAG, de los cuales tres nacieron hace dos semanas en excelentes condiciones, comentó Lacey.

Lacey concretó que una vaca Simmental puede tener su primera cría a los 23 meses de edad, mientras en otras razas el promedio es a los 36 meses. Además, un macho de 12 meses puede llegar a pesar 600 kilos, lo cual se logra en otras a eso de los 46 meses.

El rendimiento en canal -al sacrificar el animal para la producción de carne- también es superior. En los Simmental, se alcanza alrededor de un 63 por ciento del peso en pie, mientras en otras razas el promedio es de 55 por ciento. El macho Simmental está fértil a los 15 meses, lo cual brinda una gran posibilidad de aprovechamiento de su capacidad reproductora.

En la ECAG, los tres embriones fructificaron en vacas receptoras de razas cebuinas. Los animales tienen las características de sus padres genéticos; en este caso, de haciendas de Estados Unidos.

La raza Simmental apenas se está introduciendo en Costa Rica. Existen entre 40 y 50 animales puros, y entre un medio y tres cuartos de la raza, alrededor de 200 animales. Actualmente se organiza la asociación de criadores de esa raza y usted puede inscribir su hato o convertirse en criador y aprovechar las ventajas del implante de embriones si lo gestiona por medio del teléfono 443-6932.