La presidenta Laura Chinchilla lanzó ayer una fuerte crítica contra el mandatario nicaraguense Daniel Ortega y anunció el envío de más policías al cordón fronterizo para reforzar la seguridad.
Así lo dijo en el Museo Nacional, en San José, en la conmemoración de los 62 años de la abolición del ejército.
“Hoy me permito recordar a esos señores del norte, con sus palabras altisonantes, sus bravuconadas y el uso de la fuerzas, quiero recordarles que solo los cobardes son valientes con los indefensos”, dijo sin citar el nombre de Ortega, minutos antes de recordar el refrán de “al que le cae el guante, que se lo plante”.
En su mensaje en el antiguo cuartel Bellavista en el cual José María Figueres Ferrer disolvió la institución militar, la gobernante agregó: “Nos han seguido amenazando de que van a seguir adelante. Han hecho insinuaciones de posibles incursiones en el río Colorado, de posibles trabajos que afecten la boca y el cauce”.
Pese a ello, dijo, no enviará policías a la zona de invasión (isla fluvial Calero, en Pococí) y recalcó que este conflicto no sacará a Costa Rica “de esta tradición casi sagrada" de no tener Ejército.
Tampoco precisó el número de oficiales que irán a la frontera.
“Provocaciones”. Un mes y medio después de que brotó la disputa por la incursión, Chinchilla calificó la crisis como “una prueba” a la convicción pacifista del tico.
“No serán sus reiteradas provocaciones (desde Nicaragua) las que nos arrastrarán a los escenarios de violencia y agresión a que ellos están acostumbrados”, dijo ante estudiantes, funcionarios y excombatientes de 1948.
“Nuestra principal arma es la diplomacia”, afirmó a los periodistas después del discurso.
De hecho, ella viaja hoy a la Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, en Mar del Plata, Argentina, donde espera obtener apoyo para que Nicaragua retire sus tropas de Calero, lo cual, hasta el momento, no ha logrado la Organización de Estados Americanos, que revisará el caso el 7 de diciembre. En cuanto a Ortega, no se se sabe si irá a Mar del Plata.
Recursos. Chinchilla también insinuó que el Gobierno de Ortega se aprovecha de la ausencia de fuerzas armadas en Costa Rica. “Vean que no hace lo mismo con Honduras (...) Nosotros estamos en permanente estado de indefensión”.
Lamentó que, ante la carencia de fuerzas armadas, Costa Rica también carezca de un cuerpo policial suficientemente grande, equipado y entrenado.
Por eso pidió a los diputados aprobar proyectos de ley que permitan financiar el sistema de seguridad para proteger el territorio, pero también combatir el narco.
Para Chinchilla, una Policía más fuerte, con un cuerpo especializado en patrullar las fronteras, serviría al menos para disuadir incursiones como la que ejecutó Nicaragua.