San José (Redacción). Vale la pena dudar sobre la inocencia original de los cuentos de hadas; pero aún si la tuvieran, Hollywood planea seguirla saqueando a manos llenas. Este 2013 viene con Jack, el cazagigantes ( Jack, the Giant Slayer ), filme que se estrenó el viernes pasado en Estados Unidos, y que tuvo un desempeño mediocre en taquilla, estimado en $28 millones para este fin de semana, según el sitio E! Online .
La película es una reinvención del cuento tradicional conocido como Juanito y los frijoles mágicos. La nueva película viene con un Juanito –o Jack– ya mayorcito que tiene que luchar contra gigantes.
El filme se suscribe en la tendencia que pusieron en marcha en el 2012 dos películas que reinventaron la historia de Blancanieves , y otra sobre Hansel y Gretel convertidos en cazadores de brujas.
El filme marca el regreso de Bryan Singer, el director de Los sospechosos habituales ( The Usual Suspects ) y X-Men , cinco años después de Operación Valquiria , sobre la conspiración contra Hitler.
Jack es interpretado por Nicholas Hoult, quien debutó en la película del 2002 Un niño grande ( About a Boy ), coprotagonizada por Hugh Grant. En el nuevo estreno, Jack descubre que tiene frijoles mágicos. Una noche de lluvia, mientras una princesa fugitiva se refugia con él, un frijol echa raíces en su casa y crece velozmente hasta llegar al borde del cielo.
En la cima de la planta se extiende un reino de gigantes sedientos de sangre expulsados del mundo de los humanos desde tiempos inmemoriales. Jack decide rescatar a su princesa, llevada a las alturas al crecer la planta, mientras los monstruos se preparan para descender e invadir la Tierra.
Respuesta. El filme fue recibido fríamente por la crítica estadounidense. Varias reseñas se preguntaron dónde quería llegar el director con una película que mancha su brillante currículo.
Más allá del filme en particular, varios críticos han lamentado la tendencia de “actualizar” los relatos tradicionales.
“Estas películas quieren cambiar la historia original pero mantener un aire a cuento de hadas; pero la razón por la que esas historias funcionaron en primer lugar es por su estructura estrictamente simple. Por el contrario, estos refritos complican esa misma estructura”, comentó la columnista Meera Aiyagari en el sitio Policy Mic .
Por otra parte, Terrence Rafferty, de The New York Times , ya se había referido a esta tendencia de rehacer los clásicos.
“Las realidades sociales sobre las que dependen originalmente los cuentos de hadas son incomprensiblemente extrañas para las sensibilidades del siglo XXI, apestan a feudalismo. Y las lecciones que se supone que enseñan a nuestros jóvenes no tienen mucha fuerza en estos días”, comentó.
Por su parte, el director Bryan Singer explicó ante New York Daily News : “Simplemente pienso que la tecnología ha llegado a un lugar en el que es tiempo de empezar a recontar estas historias a gran escala. Es tan simple como eso”.