San José (Redacción). El pretendido careo entre el exministro del MOPT Francisco Jiménez y el exdirector del Conavi Carlos Acosta acabó esta mañana sin confrontar las versiones de uno y otro sobre la trocha, como se propusieron los diputados en la comisión que investiga este proyecto.
Durante dos horas de audiencia, Jiménez y Acosta contestaron preguntas de los diputados de la Comisión de control de ingreso y gasto público, centrados sobre todo en contrastar las palabras dadas el martes de la semana pasada por otro exjefe del Conavi, Manuel Serrano.
El exdirector del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) y Jiménez, quienes dejaron sus puestos tras las denuncias sobre supuestas ilegalidades en torno al proyecto, rechazaron cualquier responsabilidad sobre la fiscalización de la obra.
Acosta recordó que estaba en vacaciones cuando decidieron construir la trocha y que en el proceso era difícil la comunicación con los ejecutores del proyecto (en alusión a Serrano). “Era difícil localizar a alguien allá metido en la montaña”, advirtió.
Jiménez recordó que el Gobierno había señalado “emergencia” para construir la trocha, con el argumento de que había invasión de Nicaragua (el caso de isla Calero). “No era mi tarea dudar de si había invasión”, contestó Jiménez a los diputados, quien comunicó a Serrano las denuncias en su contra por parte de contratistas de la zona fronteriza.
En los últimos cuatro minutos la presidenta de la comisión, Patricia Pérez (Libertario), cuestionó a Jiménez sobre la existencia y funciones de un grupo asesor para temas de infraestructura en la Casa Presidencial, en el que habrían estado el hermano de la mandataria, Adrián Chinchilla, y el empresario Carlos Espinach, además del consultor Federico Baltodano.
El exministro dijo recordar que existía ese comité, pero “en ese grupo no se tomaron decisiones sobre la trocha”, advirtió. Esta declaración llevó a Pérez a concluir que Jiménez se contradice con lo que ha dicho en otros momentos, lo cual él refutó.
La sesión comenzó a las 9 a. m. y acabó a las 11 a. m. en una sala atiborrada por siete diputados, asesores, prensa, los dos comparecientes y sus abogados. También estaban dos fiscales de la Unidad de Anticorrupción del Ministerio Público, pues hay una causa penal abierta sobre el tema.