Setenta y cinco años después de su muerte, el escritor Federico García Lorca volvió a llenar teatros en todo el mundo.
En esta ocasión, su obra lírica y dramática cobró vida en la voz de destacados poetas, dramaturgos y académicos.
Fragmentos de poesías como Alma ausente, Romance sonámbulo y Reyerta se escucharon una y otra en los homenajes que se realizaron la semana pasada para recordar el 75.º aniversario de su fusilamiento durante la Guerra Civil Española.
Escritores europeos aprovecharon esas actividades para recordar la trayectoria del español y festejar su prodigiosa pluma.
El poeta granadino Fernando Valverde destacó la pasión que García Lorca logró transmitir a los lectores con su trabajo.
“Fue capaz de conmover a quienes nunca habían leído un solo verso. Algunos poetas consideran esto una cuestión menor; sin embargo yo creo que ahí está su grandeza”, señaló el artista en declaraciones dadas al periódico español El Día.
Indicar cuál fue el mejor legado de García Lorca no es algo sencillo. El periodista y novelista Antonio Colinas destaca Romancero Gitano, publicado en 1928.
“Tiene un lenguaje muy libre y muy rico”, indicó el escritor a la agencia de noticias EFE.
Para Francisco Brines, superviviente de la llamada generación española de los 50, la obra lorquiana que más le emocionó es Llanto por Ignacio Sánchez Mejías. “Es la mejor elegía en castellano, junto con la de Jorge Manrique. Hablar de esta elegía es hablar de un poeta extraordinario”, aseguró.
En América. “Cuando llegue la luna llena iré a Santiago de Cuba, / iré a Santiago, en un coche de agua negra”. Así comienza Son de negros en Cuba, uno de los poemas que García Lorca escribió en honor a la nación caribeña.
El poeta llegó a La Habana en marzo de 1930 para una breve visita; sin embargo, el cálido ambiente de la isla lo motivó a extender su viaje por tres meses.
A pesar de su corta estancia, García Lorca anudó un idilio con Cuba, donde sigue siendo un poeta popular y admirado.
Por esta razón, los artistas cubanos decidieron unirse al 75.º aniversario del asesinato del español.
Por ejemplo, el Centro Cultural Bertold Brecht presentó, el fin de semana pasado, un espectáculo llamado Lorca en La Habana.
En el show se destacaron algunas escenas de sus principales obras dramáticas, como La casa de Bernarda Alba y Bodas de Sangre.
Además, se hace referencia a las experiencias que el poeta vivió en la isla caribeña.
El intelectual cubano Ángel del Río asegura que Lorca se entregó a su personalidad pagana durante su estancia en La Habana.
“Encontró en Cuba el sol, la luz y la alegría; encontró además la gracia de sus ciudades andaluzas y estampas gaditanas iluminadas por el sol de los trópicos”.