¿Anguila en lugar de filete de corvina? Evite el engaño

Reglamento para etiquetar productos pesqueros rige desde hace una semana

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¿Sabía que en el país es posible que usted en alguna ocasión haya comido anguila o barracuda, cuando lo que pagó fue filete de corvina?

Una investigación reciente de la fundación MarViva, del Ministerio de Economía (MEIC) y del Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (Incopesca), halló que decenas de pescaderías y marisquerías ofrecen la anguila o barracuda como si fuera filete de corvina.

Para evitar que esto ocurra, los consumidores cuentan ahora con dos herramientas que les permitirán exigirle al negocio que les indique la diferencia entre las diversas especies de pescado.

La primera es el Reglamento para el Etiquetado de Productos Pesqueros, promulgado por el MEIC y el Ministerio de Agricultura (MAG) en febrero pasado y que entró en vigencia el pasado 14 de agosto.

Las disposiciones buscan corregir irregularidades en el uso de nombres comerciales que confunden o inducen al error al consumidor, así como eliminar el uso de nombres de “fantasía”.

Por ejemplo, es el caso de la carne de tiburón, que se ha comercializado como bolillo, bolillón, cazón y cornuda. Desde el 14 de agosto, el reglamento exige que la carne de tiburón se rotule como tiburón bolillo o tiburón cazón.

“Buscamos que si el consumidor es una persona sensible con el tema del aleteo del tiburón, que tenga la información veraz para que tome una decisión de compra acorde con sus valores”, informó Viviana Gutiérrez, de MarViva.

El incumplimiento de esta normativa podría exponer al negocio a sanciones económicas que, en el peor de los casos, alcanzarían los ¢8 millones.

Guía.La segunda herramienta de apoyo para el consumidor es la llamada Guía de identificación de filetes de pescado y mariscos, lanzada ayer por parte de MarViva, el MEIC y el Ministerio de Agricultura.

Esta guía –creada en el marco del reglamento de etiquetas– contiene información sobre las principales características de los productos pesqueros de mayor consumo en el mercado nacional, así como fotografías.

Gutiérrez dijo que el negocio debe indicar, en letra grande, el nombre de la especie común, ya sea anguila, atún, bagre, barracuda, camarón blanco, camarón fidel, corvina, reina, corvina pequeña y dorado, entre otras.

Por ejemplo: el filete de anguila es más delgado y largo que la corvina reina, y su color es blanco nácar. El filete de anguila tiene gran cantidad de fibras musculares.

Por su parte, la corvina reina es fácilmente identificable porque quedan partes de la piel color blanco adheridas al filete. Su color es blanco o rosado.

Gutiérrez agregó que el objetivo de que el consumidor tenga clara la especie responde, también, a un asunto de precio. Explicó que especies que los pescadores venden a precios bajos se comercializan más caras y con otros nombres.

“Los consumidores tienen derecho a saber lo que están comprando”, manifestó Mayi Antillón, ministra de Economía. Añadió que el cliente debe exigir la etiqueta.