Si usted es de los que han caído a los pies de las historias épicas de la época de los romanos, esta será una muy buena noticia: en la caída del telón de la magnífica serie Spartacus , la crítica especializada ha concluido que la última será la mejor de todas las temporadas anteriores.
A los expertos no les han dolido prendas para destacar que el creador, Steven S. DeKnight ( Smallville ), logró aportar a la serie algo más de lo que tenía en el arranque, que ya era de por sí muy bueno para muchos.
Si bien en la anterior temporada la motivación principal de estos gladiadores, la venganza, queda satisfecha, los guionistas han tenido que apoyarse en otra justificación: la propia libertad.
Espartaco ya no lucha por derrotar a la República ni por ajusticiar a cuantos romanos se cruzan en su camino. Su único fin, generado entre otras cosas por su propia leyenda, es salvar a los miles de seguidores que tiene. No busca, por tanto, enfrentamiento, sino una salida a su cruzada, según lo analiza blogtomados.wordpress.com
Es así como este miércoles 2 de abril, a las 10 de la noche, llega por la señal del canal FX la última temporada de una de las series más vistas: Spartacus: la guerra de los condenados protagonizada por el actor Liam McIntyre, Manu Bennett y Dustin Clare. Varios meses pasaron desde la muerte de Gaius Claudiuss Glaber (Craig Parker) y el ejército rebelde, liderado por Spartacus (Liam McIntyre) y sus generales Crixus (Manu Bennett), Gannicus (Dustin Clare) y Agron (Daniel Feurriegel), continúan acumulando victorias sobre Roma.
Pero Spartacus está decidido a hacer caer toda la república romana. Paralelamente, el Senado romano contacta al político de clase alta, Marco Crassus (Simon Merrells), para idear un plan estratégico que le permita junto al joven Julio César (Todd Lasance) como un aliado, enfrentar a los rebeldes. Así se desata una guerra final nunca antes vista y trayendo un final épico.
Los pluses de la serie en su totalidad han sido muchos pero, para empezar, fue majestuoso cómo se pudo resolver un acontecimiento dantesco como la inesperada muerte de su protagonista inicial, Andy Whitfield (Gabriel), víctima de un cáncer.
Pero tres temporadas y una precuela después, Spartacus termina por la puerta grande con La guerra de los condenados , que no es otra cosa que una especie de regresión a los orígenes dramáticos de la serie, combinando intriga y violencia con la efectividad que ha caracterizado siempre a la trepidante serie, que presenta de manera novelada la vida del famoso gladiador rebelde Espartaco.