Antes de Spotify, de YouTube y hasta antes del discman, estuvo la mixtape. Poner en la casetera una mixtape era tener una cita a ciegas con una colección de canciones de distintos lugares, un regalo personalizado que con el tiempo se volvía una marca de una época y representaban un sentimiento en particular.
Esa clase de regalo es la que hace Rodolfo Fo León en su primer libro, Perra Pop. Mixtape , un compendio de sus textos sobre grupos nacionales de rock . Su ópera prima fue presentada este mes en el marco de la Feria Internacional del Libro y fue editado por la Editorial Germinal.
León se define como un observador. Cuenta que hace unos años se dedicó a estudiar patrones para identificar fraudes a empresas multinacionales. La observación de tendencias nunca fue exclusiva de su trabajo, dice, sino algo vital para el paso que le dio un giro a su vida.
“En mi trabajo: veía patrones de conducta en públicos, el movimiento de los macros; estaba siempre atento. Por ser así, es más fácil sentir cuando algo se puede hacer mejor y eso fue lo que sentí en el 2010 cuando más de cinco bandas alcanzaron un nivel excepcional, uno que antes alcanzaba si acaso una al año. Eran bandas impecables y, a pesar de eso, teníamos problemas”, comentó a Viva en una entrevista durante la feria.
LEA: Conciertos Perra Pop serán un escaparate para conocer bandas nuevas a partir de junio
Estos problemas, explica, se daban (en pretérito imperfecto, es decir, se mantienen) porque las bandas no trabajaban con modelos sostenibles y por un faltante de información histórica, de los pioneros del rock en el país.
El primer problema lo quiso resolver con el ciclo de conciertos Perra Pop, que inició en mayo del 2015. El segundo, lo trató con sus artículos sobre distintas bandas nacionales; empezó mucho antes, hace unos diez años, cuando abrió su blog.
Ahora, los conciertos de Perra Pop de cada jueves en el Lobo Estepario, en San José, son su principal fuente de ingreso.
En vivo. La primera temporada del ciclo de conciertos Perra Pop inició con Monte, banda de rock que en ese momento ya era considerada un referente de la escena josefina, y por Señorita Abril, una banda que apenas había tocado un par de conciertos y tocaba completamente disfrazada de canciones de rock psicodélico.
Ese combo entre una banda nueva y otra más conocida se mantuvo durante la primera fase del ciclo, y León, en una movida por forzarse a escribir más, se planteó hacer un texto en su blog para cada una de las bandas.
“Al principio escribir las columnas era un reto. Para la tercera semana sentí que me estaba repitiendo, entonces empecé a elevar la complejidad y dejé de pensar en dos textos semanales, sino más bien 8 al mes; cada vez que publicaba el itinerario de conciertos de cada mes empecé a investigar y a escribir.
Después de dos meses de escribir, Juan Hernández, de Editorial Germinal, le dijo las palabras mágicas: “Eso tiene pinta de libro”.
Estilo. Para Fo, fue crucial que la propuesta de libro llegara en el 2015. “Bandas grandes se estaban desintegrando y otras nuevas estaban saliendo y llegó a San José la escena de grupos de Occidente”, explicó.
En el libro se puede leer la historia de 30 grupos nacionales y la de varios “personajes” que han marcado la historia del rock , la que León vivió. Su acercamiento a la escena de música alternativa viene desde los 90; es decir, él ha visto esos conjuntos surgir y desintegrarse una y otra vez. Su historia de vida también se encuentra dentro de este mixtape, que inicia con la historia de su padre, Javier León, quien fuera productor musical en los años 70.
Fo León cita como influencia en su estilo a Luis Chaves –quien escribió el prólogo de Perra Pop. Mixtape – y al icónico periodista de música Lester Bangs, dos autores de palabras sencillas, empecinados en hacer que a través de una imprenta transmitan sensaciones al resto del mundo.
“Creo que es peligroso tratar de escribir de arte calificándote como un conocedor de la técnica. Si uno quiere democratizar el acceso y el gozo del arte, uno puede hablar de lo que este le causa a uno y, para hablar de eso, hay que dejar claro que uno habla de uno mismo” expresó León.
Canción de Los Waldners dedicada a Fo León
De ahí nació su necesidad de evidenciarse en el texto, como lo hace desde el primero de estos. Por este carácter personal y por esta informalidad el documento no pierde valor histórico; todo lo contrario, gana una capa extra.
León ha trabajado de cerca con bandas como Bruno Porter, E Simple y Los Waldners, mencionadas en el libro.
Su mixtape, que es vendida como una crónica, habla más de caras que de fachadas, de canciones que de espacios, pero sabe invitar al lector a salir a buscar esa música enigmática. León dice que no es un libro definitivo y asume como necesarias las omisiones que tuvo que hacer.
“Muchas de mis bandas favoritas no están porque esto se formó con las primera 30 bandas que tocaron y cualquier cosa que yo pudiera relacionar con ellas.
"Creo que hay grandes espacios en blanco, como hablar de los años 80 y Mario Maisonnave, pero tuve que hacer lo mismo que le digo a las bandas cuando entran a grabar: ‘toquen seis canciones y jalen. Esto es lo que hay, esto es lo que sale’”, explicó León.
Para él, su serie de conciertos fue algo más que un espacio, fue una forma de mostrar un modelo de conciertos ideales, con puntualidad, buen sonido y distribución equitativa de las ganancias.
León espera que su libro sea también la primera piedra en una tradición de libros sobre la historia del rock de Costa Rica.
“(Como escena) nos podría dar mucha paz entender que somos parte de algo más grande y que estos grupos no están desperdiciando su tiempo: están construyendo algo duradero, música que se logra conectar con gente y que logra conectar a las personas entre ellas; eso, para mí es cumplir un gran objetivo”, finalizó León.